Iberdrola ve más fácil su fusión con Unión Fenosa tras la compra de Scottish Power
·sanchez galan espera menos obstaculos de las autoridades europeas que de las españolas
El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, afirmó ayer que la compra de Scottish Power por 17.200 millones facilitará una posible fusión con Unión Fenosa, ya que ahora esta operación deberá ser autorizada por la Comisión Europea y no por las autoridades españolas. Según Sánchez Galán, Bruselas pone menos trabas que las autoridades españolas a estas fusiones y no le obligará a desinversiones «muy valiosas».
MADRID
El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, negó ayer que la compra de Scottish Power sea una operación defensiva y recalcó que, lejos de perjudicar una eventual integración con Unión Fenosa, la facilita «desde el punto de vista regulatorio».Iberdrola ha cerrado un acuerdo con Scottish Power para lanzar una oferta de compra sobre el grupo escocés, por un importe de 17.200 millones de euros, del que surgirá la tercera compañía energética europea, sólo por detrás de la francesa EDF y la alemana E.ON. Sánchez Galán aclaró que, tras la adquisición de la compañía escocesa, una futura operación gestada desde el Estado español tendrá dimensión comunitaria, por lo que su autorización no correspondería a Madrid sino a Bruselas. La Comisión Europea se considera competente para analizar una operación de concentración cuando una de las empresas implicadas obtiene al menos un tercio de su facturación fuera de su mercado estatal. Sánchez Galán considera que la Comisión parece «más favorable» a estos movimientos, tal como ha quedado demostrado «con la operación de E.ON sobre Endesa o en el caso de Gaz de France sobre Suez».
Desinversiones En este sentido, dejó claro que Iberdrola no liderará una operación en el Estado español «en un situación jurídica donde uno más uno sean menos que uno. No estamos dispuestos a que por tener que hacer operaciones con un español nos obliguen a desinvertir en activos que para nosotros son muy valiosos», apuntó, en referencia a las condiciones impuestas para acometer fusiones.
Sánchez Galán anunció que la compañía llevará a cabo desinversiones adicionales de activos de Iberdrola por más de 1.000 millones de euros en los doce meses posteriores al cierre de la transacción de esta operación. Precisó que la eléctrica vasca no se verá afectada negativamente por estas desinversiones, dado que el Plan Estratégico 2007-2009 «se seguirá en los términos previstos», aunque dejó claro que tampoco se cambiarán los planes de inversión de Scottish. «Podemos pensar que se van a llevar a cabo los planes de inversión de Iberdrola más los de Scottish», apuntó. La operación, acordada ayer por los respectivos consejos de administración, estará concluida en abril, una vez que reciba el visto bueno de las autoridades europeas de la Competencia y de las juntas de accionistas. Sánchez Galán dijo que la postura de la constructora ACS, su principal accionista y también el de Unión Fenosa, ha sido siempre «muy positiva» y que la constructora ha tenido información puntual. Por su parte, ACS considera que todavía es «pronto» para decidir si va a acudir a la ampliación de capital anunciada por Iberdrola. La constructora posee el 10% del capital, aunque está pendiente de la autorización poder alcanzar el 24,9%, que posiblemente obtenga mañana por parte de la Comisión Nacional de la Energía. Iberdrola pagará 11,5 euros por cada acción del grupo escocés, en metálico, acciones propias y a través de un dividendo especial. De esta forma, los accionistas del grupo británico controlarán el 21,4% del capital del grupo resultante. A partir de ahora habrá un período de 45 días para dar oportunidad a eventuales ofertas competidoras. Una vez transcurrido ese plazo, Iberdrola prevé lograr la autorización de Bruselas a mediados de febrero. Posteriormente, la operación se someterá a las juntas generales de las dos compañías, el 29 y el 30 de marzo.
Lakua dice que velará por «el núcleo vasco de la empresa»
La portavoz del Gobierno de Lakua, Miren Azkarate, consideró que la OPA de Iberdrola sobre Scottish Power es «positiva», ya que «se va a convertir en uno de los grupos más importantes de Europa», y permitirá «reforzar» su competitividad, «una de las constantes» defendidas por Industria, según indicó. No obstante, advirtió de que Lakua velará por «el mantenimiento del núcleo vasco» de la empresa. -
Un grupo de 64.000 millones de euros
MADRID El grupo resultante de la compra de Scottish Power alcanzará un valor de empresa de casi 64.000 millones de euros, un beneficio neto de 2.078 millones y ventas de 19.464 millones. Además, contará con una potencia instalada de 36.603 megavatios, un 30% más que ahora Iberdrola. Ambas empresas mantendrán sus nombres y sus respectivas sedes en Bilbo y Glasgow. Iberdrola tiene previsto elaborar un nuevo plan estratégico integrado en un plazo de seis meses a contar desde que culmine la integración. El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, aseguró que la compra «crea valor desde el principio». Destacó además que se trata de un acuerdo amistoso y que se mantendrá el dividendo previsto de 1,50 euros por acción. De hecho, el Consejo de Administración de Scottish Power recomendará de forma unánime a sus accionistas que voten a favor de la oferta. Iberdrola mantiene su compromiso de comprar activos de Endesa valorados de entre 7.000 y 9.000 millones de euros si finalmente Gas Natural se hace con la eléctrica.
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