La plataforma Arga Bizirik!, junto a otros colectivos como la Gazte Asanblada y los vecinos de Valdizarbe. hicieron un llamamiento una vez más para protestar en contra de las dos presas que están proyectadas construir en el río Arga, concretamente entre las localidades de Gares y Belaskoain. Se pudieron leer pancartas como «Ibai ederraren alde», portada por vecinos de localidades en la ribera del Arga, «Queremos un río, no queremos cloacas», de la mano de la Gazte Asanblada de Gares, y «Valdizarbe, ciudad saludable», con la cual vecinos de esta zona quisieron denunciar la ciudad de la carne que se pretende construir en el valle.

Antes de que partiera la marcha que recorrió la localidad, el Club de Piraguas, uno de los convocantes, realizó un paseo por el río, y formó las canoas de manera que mostraran las letras «Arga Bizirik!». El recorrido de la manifestación finalizó en el Ayuntamiento, hasta donde subieron con las pancartas y se leyó un comunicado.

Intereses privados

Los vecinos de las localidades por donde pasa el río Arga mostraron el afecto que sienten hacia el mismo y señalaron que no se cansarán de denunciar que «arrebatar aguas del mismo para beneficio de la iniciativa privada es, para los que nos hemos reunido hoy en Puente la Reina-Gares, un expolio en toda regla de un recurso natural y, por tanto, de dominio público».

Del mismo modo, dieron a conocer que el cambio por construir dos presas nuevas es de 158.426 euros, lo cual no están dispuestos a consentir. Advirtieron de que, si el río se queda sin caudal, «se empezará a hacer palpable por sus olores y la putrefacción de las aguas», y recordaron que entre los años 1970 y 1988 ya pasaron por esa situación. Añadieron que el problema se extenderá a todas las localidades situadas a la orilla del Arga, una vez pasado Gares.

Continuaron con la exposición de otros daños que causará la construcción de las presas: «Estamos en época de cambios climáticos y nos sorprenderán unas avenidas de aguas tan grandes que tendrán que ir soltando caudales retenidos por distintas presas y saltos». Según los manifestantes, eso dará lugar a «una nueva agresión» al cauce del río y, una vez pasado eso, se volverá «de nuevo un río sin caudal», añadieron.

En cuanto a los promotores de la obra, señalaron que «los saltos de Sarría son un recurso turístico de los nuevos habitantes de Sarría, que van a ser los consejeros de administración de las grandes empresas».

También advirtieron sobre el peligro que supone construir más presas para la producción agrícola, ya que, en su opinión, el cambio en el caudal del río afectará a las aguas del regadío. Explicaron que en el siglo XIX se regularizó el Arga a su paso por Gares, ya que se tomó agua para regadío, dejando que el sobrante volviera al río. Recordaron que esas aguas estuvieron en peligro en el año 1980, y alertan de que la cantidad de agua retenida por las presas va a ser «un riesgo añadido para nuestros famosos productos agrícolas».

Cita de Jimeno Jurío

Los manifestantes mostraron su firme intención de oponerse al proyecto, ya que, en sus palabras, «el río Arga ya está saturado de presas». De ese modo, señalaron que «los aquí congrega- dos no podemos, ni debemos y no queremos ser testigos mudos del expolio». Por último, cabe reproducir la cita que dieron a conocer relacionando la localidad de Gares con su río. La cita es de Jimeno Jurío : «En el principio fue el Río y sobre él se asentó el puente».