El Gobierno alemán desmintió ayer las declaraciones realizadas por el primer ministro francés, Dominique de Villepin, que cifró en 10.000 los empleos que suprimirá Airbus en aplicación del llamado plan de ajustes de costes «Power 8». El portavoz del Ejecutivo alemán, Thomas Steg, manifestó que «el Gobierno alemán no tiene conocimiento de que por parte de la directiva del consorcio EADS se hubiera tomado cualquier decisión concreta y definitiva».

Todas las noticias sobre el volumen de creación de puestos de trabajo y su distribución por parte de Airbus entre sus distintas sedes se basan en especulaciones, según palabras de Steg respecto a la noticia publicada ayer por el diario sensacionalista alemán «Bild Zeitung».

La información del rotativo señala que en la planta de Airbus en Hamburgo se recortarán menos de 1.000 de un total de 12.000 puestos de trabajo y que las factorías de Nordenham y de Varel serán vendidas.

Con respecto a la misma cuestión, Villepin solicitó al consejero delegado de EADS y Airbus, Louis Gallois, que no se den despidos colectivos de forma brusca, después de que se anunciara la interrupción de las conversaciones para concretar definitivamente el plan de ajuste, al no llegar a un acuerdo sobre el reparto de la carga de trabajo para la fabricación del avión A350XWB.

Por su parte, fuentes de Industria de Turbo Propulsores (ITP), empresa afincada en Zamudio y que participa en el proyecto Airbus, indicaron ayer que la planta no se verá afectada por el plan.