La obesidad prevalece en los niños de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa de 11 a 14 años, con una tasa del 19,4%, mientras en las niñas alcanza el porcentaje más elevado, un 15,6%, de 15 a 18 años.

Según los últimos datos disponibles de la Encuesta de Nutrición elaborada por el Departamento de Sanidad de Lakua, si se suma el sobrepeso, la mayor proporción reside en los grupos de 7 a 10 años y 11 a 14 años, en el caso de los chicos, con un 31,2 y un 36,1%, respectivamente, mientras que en las niñas se registra un incremento con la edad y alcanzan el máximo porcentaje de sobrepeso entre los 15 y 18 años, un 32,8%.

El bajo peso, sin embargo, sólo afecta a un 4,3% en los niños y niñas de 4 a 6 años. La prevalencia de la obesidad es más elevada en los grupos socioeconómicos más desfavorecidos.

Respecto a la percepción del peso como normal o no, así como la satisfacción con su peso corporal, la preocupación con su peso o la realización de dietas, son las adolescentes las que, en mayor proporción responden que su peso es mayor de lo normal, que desearían perder kilos, presentan una mayor preocupación por este aspecto y, además, confiesan haber seguido una dieta al menos en una ocasión.

Insatisfechas por el peso

En concreto, el 28,7% de la población de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa de 12 a 18 años considera que su peso es mayor de lo normal, el 35% en el caso de las mujeres y el 22,9% en los varones. Si se pregunta por una percepción de peso menor de los normal, los varones doblan en porcentaje al colectivo femenino (12,2%).

La percepción de que el peso corporal es mayor de lo normal aumenta a medida que empeora el nivel socioeconómico, con un 25% en el grupo bajo de jóvenes, y especialmente en el caso de las adolescentes (37%).

La mitad de los adolescentes no están satisfechos con su peso -un 40,6% hombres y un 56,1% en las mujeres-. En el caso de la mujeres, la mitad confiesa que desearía reducir kilos. Sin embargo, existe un 12,5% de adolescentes que están disconformes con su peso en sentido contrario, y desearía aumentarlo.

La población menos preocupada por su peso corporal es la que pertenece a los grupos con mejor situación socioeconómica y se incrementa cuando más desfavorecida es la situación.