El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Corea del Norte aseguró ayer a la agencia de noticias norcoreana KCNA que EEUU retirará al país de «la lista de países que apoyan el terrorismo» y que «le entregará compensaciones económicas y políticas, como el levantamiento de la ley que prohíbe el comercio con países enemigos».

A cambio, Pyongyang convino a «desmantelar todas sus instalaciones nucleares» antes de que termine el año. Según explicó, la Administración Bush tomó esta decisión durante el encuentro mantenido el pasado fin de semana en Ginebra entre el máximo negociador norcoreano Kim Gye-kwan y su homólogo estadounidense, Christopher Hill. Este último anunció el domingo el compromiso de Corea del Norte de proporcionar una declaración completa de todo su programa nuclear, incluido el programa de enriquecimiento de uranio.

No obstante, Washington se apresuró a desmentir las informaciones difundidas por el portavoz ministerial norcoreano. Fuentes del Departamento de Estado citadas por la cadena de televisión CNN dijeron que antes de borrar al país de la citada lista «deberá hacer varias cosas en áreas consideradas clave». Estas mismas fuentes sostuvieron que la eventual retirada del calificativo «terrorista» a Pyongyang «no es inminente».

Próxima cita, en Pekín

El secretario de Estado de EEUU para Asia y Pacífico señaló que la Agencia Internacional para la Energía Atómica (AIEA) verificará el proceso de desmantelamiento del programa nuclear.

Los acuerdos alcanzados en Ginebra serán discutidos a mediados de este mes en Pekín en la reunión ministerial que sostendrá el Grupo de los Seis (Estados Unidos, Rusia, China, Corea del Norte y del Sur y Japón).