Al señor Ibarretxe. Somos parte del colectivo de auxiliares de Enfermería que trabaja en Osakidetza, en el Hospital Donostia (Edifio Amara). Usted, como lehen- dakari, sabrá del buen hacer de sus consejeros, y nosotras queremos centrarnos en el de Sanidad, que es el que nos compete. Sr. Ibarretxe, estamos trabajando en unas condiciones pésimas (falta de personal, sobrecarga de tareas, etc.), a destajo. Pero nosotras damos y queremos calidad y humanidad pese al descontento existente en Osakidetza (exceptoentre los médicos sobradamente recompensados económicamente).

Cuando el Sr Inclán habla de la Sanidad, ésta parece «Alicia en el País de las Maravillas», pero se olvida conscientemente de los trabajadores que a diario nos esforzamos por una sanidad pública de calidad. Imaginamos que nuestros consejeros este verano habrán ido de crucero; pues sepa usted que nosotras dependemos de la paga extra para poder pagar algunas deudas. Los médicos viajan con las casas farmacéuticas, y sus cursos se pagan con dinero público, para después trabajar en la sanidad privada. En cuanto a la carrera profesional, no es sino una subida de sueldo para determinadas categorías. ¿Acaso no somos buenos profesionales? ¿Acaso piensa que la sanidad sólo la componen los médicos? Nos hemos enterado que compañeros nuestros han empezado la campaña electoral. Sepan que nos sumamos a ella. Dios guarde a usted muchos años, y nos veremos en las urnas.

Atentamente.