ABAO estrena una producción propia de «Poliuto», de Donizetti

La ABAO estrena esta semana «Poliuto», una producción propia en la que ha intervenido el director de escena Ignacio García. Supondrá el debut en el papel de «Paolina» de Fiorenza Cedolins, una de las grandes sopranos en el repertorio italiano. Comparte el protagonismo con el tenor Francisco Casanova y el barítono Vladimir Stoyanov.

Izaskun LABEAGA | BILBO

‘‘Poliuto’’ es un tragedia lírica en tres actos, con música de Gaetano Donizetti, que falleció antes de que su versión pudiera ser representada en un teatro italiano. La censura napolitana impidió durante una década su representación al mostrarse en escena el martirio de un santo. Por ello, preparó una adaptación en lengua francesa sobre un nuevo libreto, que se estrenó el 10 de abril de 1840 en el Teatro de Ópera de París.

La Asociación Bilbaina de Amigos de la Ópera (ABAO) presenta el sábado una producción propia, basada en la versión original. Su acción se desarrolla en Mitilene, en Armenia, en el siglo III d.c., bajo el Imperio Romano. Narra la historia de un romano que se convierte al cristianismo y que por ello es condenado a morir devorado por los leones. Además, se asiste al tradicional triángulo amoroso tenor-soprano-barítono.

El trío protagonista de este nuevo montaje está integrado por el tenor dominicano Francisco Casanova, como ‘‘Poliuto’’; la soprano Fiorenza Cedolins, en el papel de ‘‘Paolina’’; y Vladimir Stoyanov, como ‘‘Severo’’. Da vida al malvado ‘‘Callistene’’ Giovanni Battista Parodi. Completan el cartel Maurizio Pace, como ‘‘Nearco’’, y Mikeldi Atxalandabaso, como ‘‘Felice’’.

Ignacio García ha ideado una escena gris, en la que se puede distinguir el mundo de la antigüedad. No obstante, el escenógrafo madrileño ha querido subrayar las ideas todavía vigentes que plantea la obra, con un imaginario «que el espectador podrá reconocer facilmente».

Escrita en 1838, «narra una historia profunda pero moderna, que habla de la persecución, del totalitarismo, de la capacidad que tiene el hombre para destruir, de cómo la guerra acaba contaminándolo todo», explicó ayer durante un encuentro con periodistas. «No es un discurso puramente visual –añadió–; he pretendido que, gracias al talento de los solistas, ese mundo en guerra sea un estímulo para que los personajes tengan algo que defender».

García agradeció públicamente «la libertad» que le ha otorgado la ABAO para actuar según su criterio, «algo que no es tan frecuente en la dirección de escena», lamentó.

En el foso, Fabrizio Carminati dirigirá a la Orquesta Sinfónica de Navarra. Gran conocedor de este repertorio, Carminati subrayó ayer que Donizetti «hace de la palabra un elemento fundamental; los personajes dicen cosas muy importantes».

Entre dos épocas

Se trata de una de las últimas obras de Donizetti, en la que ya se acerca y converge con el estilo verdiano. El compositor italiano se apoyó en las cualidades técnicas de los cantantes para desarrollar su escritura vocal. Entre las voces que le inspiraron, fue muy importante Adolphe Nourrit. «Donizetti vaticinó  lo que llegaría a Italia 40 ó 50 años después», indicó el director musical, tras incidir en las dificultades que plantea ‘‘Poliuto’’ para los cantantes.

En la misma línea, Francisco Casanova manifestó que «en la vocalidad de ‘Poliuto’ está el ser del tenor moderno».

La ABAO ofrece así una inmejorable ocasión para presenciar un título infrecuente y que apenas ha conocido nuevas producciones en los últimos años.

Se enfrentará, asimismo, a una ópera exigente el Coro de Ópera de Bilbao, con Boris Dujin al frente. Las voces de la agrupación prácticamente no abandonarán el escenario.

‘‘Poliuto’’ se representará en el Palacio Euskalduna el sábado y los días 19, 22 y 25.