Los comunistas checos han decidido jugar todas sus cartas en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de hoy presentand a su propio candidato frente al presidente saliente, Vaclav Klaus, y a su rival en la primera vuelta, el checo-americano Jan Svejnar.

Aunque se había mencionado a otras personalidades, sólo la diputada europea (no inscrita) Jana Bobosikova, ex periodista de 43 años salida de la derecha liberal, ha aceptado llevar la bandera roja ante los electores de la Cámara Baja y el Senado.

Sus oportunidades son numéricamente nulas, pero políticamente su candidatura va a pesar mucho. El Partido Comunista (KSCM) pide, en contrapartida a sus 26 diputados y 3 senadores, un pacto a largo plazo y un compromiso firme contra el escudo antimisiles.