El responsable de política social de ELA, Mikel Noval, denunció ayer que la rebaja del IRPF aprobada el miércoles por las haciendas de Lakua y las diputaciones de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa «no compensa ni la mitad de la subida de los precios», y criticó que estas instituciones tratan de modificar el IRPF y el Impuesto de Sociedades «sin ninguna voluntad de realizar un debate social».

El órgano de coordinación tributaria, que reúne a las cuatro instituciones, acordó aplicar la deflactación (adaptación de las tarifas del impuesto a la inflación) a partir de julio, mediante la reducción de las retenciones en las nóminas de los asalariados.

Noval denunció que si se confirma que la deflactación será de un 2% la reforma «no serviría para compensar ni siquiera la mitad de la subida de los precios en 2007, que fue del 4,2%. Nos encontraríamos ante un fraude, un nuevo engaño a la sociedad». Asimismo, UGT criticó que la modificación «llega tarde y es insuficiente», y reclamó que los gobiernos forales apliquen también la rebaja de 400 euros que ofrecerá el Gobierno español. CCOO opinó igualmente que, en la práctica, la deflactación del 2% supone una penalización fiscal para los contribuyentes.