GARA > Idatzia > > Eguneko gaiak

CRÓNICA | BANDERA DE LA CONCHA

«La Marinera» hace honor a su nombre y sentencia entre las olas

La Bandera de La Concha de 2008 ya está en la A-8 camino a Castro Urdiales. «La Marinera» hizo un auténtico regatón en el largo de vuelta sacando 18 segundos a Urdaibai y Astillero. Sería el cuarto título para los castreños en lo que llevamos de década.

p002_f02_444x444.jpg

Asier AIESTARAN

«La Marinera» de Castro dejó casi sentenciada la edición número 113 de la Bandera de La Concha en la primera jornada. Los de Juan Mari Etxabe lograron la victoria gracias a un largo de vuelta inconmensurable, en el que sacaron la friolera de 18 segundos a Urdaibai, segunda clasificada y que en la ciaboga había marcado casi el mismo tiempo que los cántabros. Aunque peores cosas hemos visto, se puede decir que el título ya va camino de Castro Urdiales.

Si no hay sorpresas el próximo domingo, estaríamos hablando de la cuarta victoria de la década para los castreños. Tras las banderas ganadas en 2001, 2002 y 2006, el triunfo en la regata más importante de la temporada serviría para curar las heridas que ha sufrido este año «La Marinera» de Castro. Perder los Campeonatos de Cantabria y España en su propio feudo y perder casi todas las opciones de ganar la Liga San Miguel también ante sus aficionados han sido golpes duros que han dejado huella en la tripulación. No obstante, gracias a su calidad, han sido capaces de levantarse tras cada tropiezo y ayer volvieron a sacar toda su raza para dejar la bandera prácticamente sentenciada.

Mención especial para el joven Iker Gimeno, que en una regata especialmente complicada para los patrones por el fuerte oleaje, volvió a reivindicarse en la popa de «La Marinera» con una auténtica lección de pundonor y saber hacer. Aunque nosotros siempre defenderemos la figura de Juan Mari Lujanbio, hay que reconocer que la apuesta de Juan Mari Etxabe decantándose por un patrón más inexperto le salió a las mil maravillas.

La tripulación que se adjudicó el triunfo en la primera jornada de la Bandera de La Concha 2008 fue la siguiente: Sergio y Antonio Miguel Montenegro, Joseba Fernández, Jon Elortegi, Aitor Dorronsoro, Alexander Esteban, Xabier Etxebeste, José Antonio Acebal, Pedro Laza, Jon Iriondo, Javier Vilariño, Pablo Casas y José Ángel Cambados, con Iker Gimeno de patrón.

Orio, de salida

La regata comenzó a decantarse antes siquiera de que las traineras se hicieran a la mar. El sorteo de calles, celebrado durante la reunión de delegados y no quince minutos antes del inicio de la regata como solía ser habitual, se cebó con la «Mirotza» de Orio, que tuvo que remar por la calle número uno, la peor con diferencia. Sabedores de lo difícil que sería aguantar el tipo por esa calle, los de Joxean Olaskoaga Aizperro decidieron arriesgar y atacaron de salida, como se suele decir en el ciclismo. Tanto es así que, mediado el primer largo, los oriotarras eran cabeza de regata.

Pero como era de esperar, Castro y Urdaibai fueron recuperando terreno poco a poco y en la ciaboga las tres traineras calcaban casi el mismo tiempo. La prueba volvía a comenzar y, como se preveía, la regata se iba a decidir en el largo de vuelta. A pesar de que en la clasificatoria fue Urdaibai la que sorprendió a propios y extraños con su espléndido trabajo en popare, ayer fue Castro la que mejor se desenvolvió en esas lides y acabó sacando 18 segundos a Urdaibai y 24 a Orio en un solo largo. San Pedro perdió 32 en total.

«Sabíamos que por la primera calle iba a ser casi imposible ganar la regata. Hemos decidido salir a muerte para sacar la máxima ventaja posible a San Pedro y poder venir hacia el centro en el largo de vuelta. Pero la ventaja no ha sido tanta y el juez no nos ha dejado ir al centro. Nos han dado dos avisos y hemos tenido que remar por nuestra calle. Creo que ha sido nuestra mejor regata y que si hubiéramos tenido otra calle hubiéramos ganado la regata», declaraba el preparador de Orio.

Asier Zurinaga, patrón de Urdaibai, era otro de los que se llevaron una gran decepción. El de Sestao estaba totalmente roto en el puerto: «El error ha sido mío. Los chicos han remado perfecto hacia fuera, pero en el largo de vuelta no he sabido dirigir la trainera. Hay veces que un patrón tiene que tomar decisiones y para cuando me he dado cuenta era demasiado tarde. Ya no hay remedio, pero cada uno tiene que llevar su propia penitencia».

Junto con Castro, Urdaibai y Orio, Astillero será la cuarta trainera que complete la tanda de honor del próximo domingo. La «San José XIV» se impuso en la primera tanda con más problemas de los que esperaba, ya que Hondarribia apretó de lo lindo durante toda la regata. Los cántabros, patroneados por Joseba Arbona, sufrieron muchísimo para dejar atrás a la «Ama Guadalupekoa», que se mantuvo con una trainera de retraso durante tres cuartas partes de regata. El empuje de Astillero en los últimos metros, una vez entraron en la bahía, elevó la ventaja hasta los doce segundos. Tirán se dejaba 49 segundos en las balizas de llegada respecto a Astillero y Donostiarra casi dos minutos.

Tal y como sucedió en la clasificatoria, los miembros de Astillero no se quedaron nada a gusto a pesar de lograr el tercer mejor tiempo de la jornada. «Nos ha tocado remar en la primera tanda sin ninguna referencia, por lo que nuestro objetivo era hacer la mejor regata posible y quedarnos a gusto con nosostros mismos. Y no ha sido así. Hondarribia ha hecho una gran regata, pero nosotros hemos sufrido más de lo esperado. Imposible no hay nada en este mundo, pero la bandera se ha puesto muy difícil. La semana que viene intentaremos irnos con el mejor sabor de boca posible», adelantó el remero oriotarra de Astillero Jon Salsamendi.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo