Corea del Norte ha suspendido el «desmantelamiento de sus instalaciones nucleares» y desde hace «algún tiempo» trabaja para «restablecer las de Yongbyon a su estado original», según un portavoz del Ministerio norcoreano de Asuntos Exteriores, que garantizó que su país había realizado «perfectamente» un 90% del desmantelamiento.

Es la primera vez que Pyongyang confirma las recientes informaciones de que se estaban dando los primeros pasos para restablecer el funcionamiento del reactor de Yongbyon, cuyo desmantelamiento inició hace casi un año. De hecho, en agosto, el Gobierno anunció la suspensión de su programa de desnuclearización. El 3 de setiem- bre, Gordon Johndroe, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de EEUU, indicó que «Corea del Norte está dando estos pasos porque no ha sido retirada de la lista negra» de países que patrocinan el terrorismo.

Así, Hyon Hak-bong, portavoz del Ministerio norcoreano de Asuntos Exteriores, explicó, en una entrevista publicada por la Agencia Central de Noticias (KCNA) que la decisión fue adoptada como «contramedida» por la negativa de EEUU de retirar al país asiático de su «lista negra». La permanencia en esa lista le impide beneficiarse de la ayuda estadounidense y supone el bloqueo de los préstamos de organismos internacionales.

«Ahora que los verdaderos colores de EEUU han salido a la luz, Corea del Norte ya no desea ser sacada de la lista de `Estado patrocinador del terrorismo' ni espera que esto ocurra», añadió.

Pyongyang comenzó a desmantelar sus principales instalaciones nucleares en noviembre y en junio facilitó una lista de sus programas nucleares, como parte del acuerdo alcanzado en 2007 en las negociaciones a seis bandas -EEUU, China, Japón, Rusia y las dos Coreas- .

A cambio, y además de los acuerdos energéticos ya puestos en marcha con Corea del Sur, Washington prometió que sacaría a Pyongyang de su «lista negra», pero no lo ha hecho y exige primero que Corea del Norte se comprometa a permitir la entrada de una delegación internacional de inspectores que verifique la declaración que entregó en junio.

El portavoz norcoreano afirmó que la «pasividad» de EEUU en esta cuestión está dirigida a intentar fortalecer su «política hostil» para Pyongyang y, además, contraviene el acuerdo de desarme firmado a seis bandas.

EEUU le urgió a que permita esa verificación y le advirtió de que tiene que elegir entre el aislamiento o los beneficios de la cooperación.