GARA > Idatzia > > Euskal Herria

Sanz confiesa que busca atar un pacto UPN-PSN, pero no convence al PP

Miguel Sanz se quitó ayer todas las caretas y reconoció que con su desmarque del PP busca un objetivo «a medio y largo plazo; la alternativa al entendimiento UPN-PSOE es tener al nacionalismo dentro del Gobierno navarro, y la inestabilidad en Navarra significa inestabilidad en España». Pero eso no convence al PP. Claridad por claridad, Esteban González Pons, amenazó con que UPN romperá el pacto si se abstiene.
p013_f01.jpg

Ramón SOLA |

Contra lo que habían anunciado muchos medios, la Ejecutiva de UPN de ayer tarde no zanjó la cuestión del sentido de voto ante los presupuestos estatales -todavía hay tiempo para ello-, pero la jornada sí contribuyó a clarificar el fondo y el trasfondo de la polémica. En una entrevista radiofónica, Miguel Sanz confesó por vez primera que el objetivo último de su desmarque del PP es cerrar un pacto estable UPN-PSN que impida cualquier cambio de estatus e incluso la presencia de abertzales en el Gobierno navarro. Una opción, por cierto, que en su día ya rechazaron expresamente UPN y CDN en una declaración parlamentaria sin parangón.

En una entrevista a Onda Cero, el presidente navarro y de UPN explicó que lo que está en juego va mucho más allá de unos presupuestos: «No es una medida cortoplacista, sino a medio y largo plazo, porque la alternativa al entendimiento UPN-PSN es tener al nacionalismo dentro del Gobierno navarro. Y la inestabilidad en Navarra significa inestabilidad en España», añadió.

Así las cosas, Sanz pidió al PP que entienda que es posible y necesario compatibilizar el acuerdo con UPN, suscrito en 1991, y una entente estable UPN-PSN en Nafarroa. Y ha decidido plasmar esta concepción con un movimiento de alto riesgo: desligarse del PP en la votación de los presupuestos estatales.

Pese a que la literalidad del texto de 1991 no parece darle la razón, Sanz insistió en que existe un recoveco que le permite este desmarque. Citó el artículo 7, en el que se lee lo siguiente: «En las elecciones generales, la campaña electoral de UPN se llevará a cabo de acuerdo con las directrices de la campaña nacional del PP, defendiendo el programa electoral del mismo, sin perjuicio de las especialidades que en lo relativo a la Comunidad Foral incorpore UPN».

En su afán de ir allanando el terreno a una abstención, Sanz tampoco dudó en descalificar la enmienda a la totalidad del PP. Argumentó que con la actual crisis económica «no valen las posturas testimoniales, no vale lo que se ha hecho hasta ahora, cuando uno gobernaba y el otro siempre presentaba una enmienda a la totalidad».

PP: «Saben qué ocurrirá»

Mientras Sanz exponía con más claridad que nunca sus objetivos de fondo, el PP le alertó también con mucha claridad sobre las consecuencias que tendría el desmarque. Más aún cuando, según el propio Sanz, éste no se materializará en la votación final del proyecto del Gobierno del PSOE, sino que se hará re- caer sobre la enmienda a la totalidad del PP y que se votará dentro de tres semanas.

El vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, explicó que de momento se limitan a «respetar, esperar y ver» qué decide UPN. Pero trató de condicionar su decisión indicando que espera que «habrá medido lo que va a suceder después». Insinuó incluso que Miguel Sanz busca una ruptura del pacto de modo consciente, porque «cuando yo hago algo sabiendo de antemano qué ocurrirá después, lo hago porque quiero que ocurra ese después».

Tras hablar de «consecuencias muy serias», González Pons insistió en no anticipar acontecimientos: «Vamos a ver qué hace UPN y reaccionaremos de la manera más afectuosa posible».

«Estoy arrepentido con Cervera, igual alguien busca entrar con alfombra roja a otro sitio...»

En la entrevista realizada en Onda Cero Navarra, a Miguel Sanz se le hizo una pregunta muy directa: «¿Se arrepiente de haber elegido a Santiago Cervera?». Y su respuesta no fue menos contundente: «Sí, y lo presenté yo».

El cabeza de lista de UPN al Congreso en las recientes elecciones de marzo refleja en este momento las discrepancias internas y supone una amenaza directa de desacato si finalmente la Ejecutiva y el Consejo Político de UPN optaran por la abstención. Cervera ha dicho que eso sería romper el pacto con el PP y que le crearía un «problema de conciencia». La Ejecutiva de UPN le dio un tirón de orejas por «deslealtad» hace unas semanas, tras lo que Cervera ha optado por el silencio, así que Sanz matizó ayer que desconoce cuál es su posición «en la actualidad».

El líder de UPN confirmó que es plenamente consciente de la situación. Cuando se le preguntó si podía garantizar que Cervera va a acatar la decisión que adopte la dirección del partido, respondió que «yo sólo garantizo lo que corresponde a mi persona. Si fuera diputado, yo lo haría, sin ninguna duda. Si alguien no lo hace, sabe las consecuencias. En cualquier caso, yo no soy partidario de la expulsión, sino de la denuncia política, de decirle `tú tienes este cargo porque te ha nombrado el partido'». A Miguel Sanz se le planteó a continuación si cabría por tanto la expulsión de Santiago Cervera de UPN, y su presidente habló de nuevo sin paños calientes: «Igual es eso lo que alguien está buscando para entrar con laureles y con alfombra roja en otro sitio...», dejó caer.

El otro diputado de UPN, Carlos Salvador, no se ha posicionado públicamente, aunque algunos medios han dado por seguro también que discreparía de una eventual abstención. R.S.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo