CALVISANO 15

BIARRITZ 23

El Biarritz logró ayer la segunda victoria del año y esta vez ha sido en la Heineken Cup, aunque los labortanos apenas tenían opciones de clasificación. Pero ganar siempre es bueno, y más cuando se está saliendo de una racha desastrosa de resultados, que le han dejado fuera de Europa y con muy pocas opciones en la Liga .

El encuentro de ayer no fue brillante, el terreno tampoco era propicio para hacer un gran choque y el tiempo tampoco acompañó. Los locales salieron fuertes, querían lograr una victoria antes de acabar la competición y se adelantaron muy pronto en el marcador.

Poco a poco, los vascos se fueron centrando en el campo y supieron contrarrestar las embestidas de los italianos. Ninguno de los dos equipos era capaz de acercarse a la línea de ensayo, por lo que los puntos llegaban con los lanzamientos a palos. El Calvisano estuvo más acertado en el primer acto y se fue al descanso ganando 12-9. Pero los minutos siguientes al descanso fueron los mejores del Biarritz. Nada más comenzar, Damiani anotó el primer ensayo de los rojiblancos y Yachvili lo transformó. El golpe fue duro para los locales, que se quedaron sin reacción. Los entrenados por González comenzaron presionando con los delanteros y el Calvisano era incapaz de pasar el medio campo. El Olimpyque, en cambio, seguía creando peligro y llegó el segundo ensayo por mediación de August y Yachvili lo volvió a transformar.

A partir de ahí, los locales bajaron los brazos y el Biarritz controló el choque, sabiendo en todo momento que el duelo lo tenía ganado, por lo que dejaron que pasasen los minutos. Fue un victoria importante para la moral, aunque el rival es bastante más flojo que los equipos que juegan en la Top 14.