El Tribunal Especial para Líbano (TSL) ordenó ayer la puesta en libertad de cuatro generales detenidos en el marco de la investigación por la muerte del ex primer ministro libanés Rafic Hariri y que fueron arrestados en Líbano en 2005

«El juez ha ordenado que, si no tienen otra causa pendiente, sean puestos en libertad», declaró el magistrado belga Daniel Fransen durante un audiencia retransmitida en directo por la televisión libanesa.

Los jueces del TSL se pronunciaron sobre un requerimiento presentado el lunes por el fiscal Daniel Bellemare, que reclamaba «la puesta en libertad con efecto inmediato» de los generales debido a que no existían suficientes elementos de prueba en su contra.

«El fiscal ha argumentado que para detener de manera provisional a un sospechoso, hay que estar en disposición de acusarle», declaró el juez Fransen. «El fiscal considera que las informaciones de las que dispone actualmente no son lo suficientemente creíbles como para justificar la acusación ante el tribunal», añadió el magistrado del TSL.

Los cuatro generales fueron detenidos en Líbano el 30 de agosto de 2005 en el marco de la investigación por el atentado que costó la vida a Rafic Hariri y a otras 22 personas en Beirut el 14 de febrero de 2005.

Aunque permanecen físicamente en Líbano, su causa depende del TSL, que abrió sus puertas el 1 de marzo cerca de La Haya, después de que la Justicia libanesa decidiera inhibirse en su favor a comienzos de abril. Los generales son Moustafa Hamdane, Jamil Sayyed, Ali Hajj y Raymond Azar, todos altos cargos de seguridad e inteligencia.