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Maite SOROA | msoroa@gara.net

A vueltas con la Ertzaintza

La técnica no es nueva. Goebbels ya la empleó hace décadas: inventar una trola, difundirla mil veces y elevarla luego a la categoría de verdad revelada. Ahora se han sacado de la manga que la Ertzaintza de Atutxa y Balza no actuó contra ETA y con esa mentira objetiva pretenden castigar... a Patxi López.

Ayer, en «Abc», Edurne Uriarte, con el frenesí de la conversa ponía el grito en el cielo porque, decía, «parece claro que ni el Gobierno de la nación ni el vasco tienen la mínima intención de levantar las alfombras de la Ertzaintza para investigar las gravísimas responsabilidades de connivencia con el terrorismo etarra que apuntan a esa institución. No tengo pruebas, dijo Rubalcaba el martes. Y no las tendrá si no se pone a buscarlas, que es lo que ha decidido el Gobierno en este caso, mirar hacia otro lado. A pesar de la grave denuncia de dos agentes de la Ertzaintza en `Antena 3'. Y a pesar de las pruebas de inacción de la Ertzaintza contra ETA acumuladas durante años». Que pregunte en estos pagos Edurne.

Puesta a repartir zurriagazos, también a Aznar le toca una palucada: «En descargo de Rubalcaba y de este Gobierno, hay que recordar que el Estado jamás ha dado un paso para perseguir ese escándalo. Tampoco los gobiernos del PP movieron un dedo, y eso que lideraron el mayor avance en la lucha contra ETA. Pero la Ertzaintza permaneció intocable. Todo el mundo lo sabía y nadie hizo nada. Ni lo hará, porque el Estado tiene miedo a intervenir. Lo que me recuerda el chiste del pringao y del millonario y la deuda con el banco. Si debes cien mil euros, tú tienes el problema. Si debes cien millones, el problema lo tiene el banco. Exactamente lo mismo que con los delitos. Si has defraudado a Hacienda, y lo digo por las acusaciones contra Bárcenas, el Estado se persona como acusación en la causa y lo anuncia con grandes titulares. Si eres un cuerpo policial que ha dejado de perseguir a los criminales, no te preocupes: Rubalcaba mirará hacia otro lado». Era eso.

Deja para el final lo que de verdad le mueve: «Al margen del grave problema de legitimidad del Estado planteado por esta impunidad, hay otra cuestión a la que Patxi López deberá responder: si ese mismo cuerpo policial está dispuesto ahora a perseguir a ETA. ¿Con los mismos policías que ordenaron dejarla en paz?». Siempre les queda el recurso a la Legión o la Guardia Mora.