La isla de Madeira, conocida hasta hace bien poco por la belleza de sus paisajes, ha pasado a estar en el epicentro del mundo del balompié gracias a ser el lugar de nacimiento de Cristiano Ronaldo. La estrella lusa dio sus primeros pasos en el Nacional de Funchal tras rechazar una propuesta del Marítimo.

A CR9, su talento le hizo emigrar pronto al poderoso Sporting de Lisboa y así dar paso a una historia de sobra conocida. Muy distinto ha sido el caminar del Nacional. Sin prisa, pero sin pausa. El conjunto isleño se estrenó en la Primera portuguesa a mediados de la década de los noventa. Poco a poco, os alvinegros han conseguido hacerse con un hueco en la parte noble de la clasificación. Siempre a la sombra del triunvirato formado por Oporto, Benfica y Sporting, el Nacional ha logrado el billete para las competiciones europeas ya en varias ocasiones.

Su temporada más destacada había sido la 2003-2004. Curso en el que destacó el trabajo del ahora colchonero Paulo Assunçao, el talento de Miguelito -posteriormente fichado por el Benfica- y los tantos de Adriano, que también militó en las filas del Oporto. La pasada campaña, el equipo que actualmente dirige Manuel Machado volvió a sorprender con una excelente cuarta posición.

Los tantos de Nené, máximo realizador de la Liga Sagrés con 19 goles, fueron vitales para la hazaña de os alvinegros. Sin embargo, una vez concluido el ejercicio, el Nacional no fue capaz de retener a su cañonero y Nené firmó por el Cagliari italiano. Los de Cerdeña pagaron casi cinco millones de euros por sus servicios, además de un salario que ronda los 450.000 euros por campaña. Otra baja sensible fue la del zaguero Maiçon Pereira, fichado por el Oporto a cambio de más de un millón de euros. En el apartado de fichajes, en cambio, la inversión fue pequeña y no llegó ningún nombre de postín.

Contra todo pronóstico, la marcha de Nené no parece haber afectado al conjunto de Funchal, ya que el pasado verano fue capaz de eliminar al Zenit de San Petersburgo en la ronda previa de la UEFA Europa League. Los rusos, venidos a menos tras su título continental de 2008 y las marchas de Arshavin, Tymoschuk y Pogrebnyak, siguen siendo un conjunto de primer orden. En cuanto al campeonato doméstico, el Nacional es quinto tras la disputa de siete jornadas. Os alvinegros suman 11 puntos, los mismos que el histórico Sporting de Lisboa, tras acumular tres victorias, dos empates y otras tantas derrotas. Su próximo rival en la Liga Sagrés, el día 26 a las 21.15 hora de Euskal Herria, será el Benfica del ex rojillo Javi García.

Un estadio pequeño y muchos brasileños

Una de las grandes fortalezas del equipo de Machado reside en los resultados que obtiene jugando como local. En el año 2007, el club decidió remodelar el Estadio de Madeira y las colindantes instalaciones deportivas del club. La inversión total fue de 20 millones y el campo de juego del Nacional puede reunir a poco más de 5.000 personas.

En cuanto a la composición de la plantilla, el dato que más destaca es la presencia de 11 futbolistas de origen brasileño. Un elemento que invita a los isleños a practicar un juego con marcado carácter ofensivo. Por lo demás, el Nacional también cuenta con Halliche, Pecnik y Tomasevic, internacionales con Argelia, Eslovenia y Montenegro respectivamente. Otro nombre que suena a los aficionados es el de Kevin Amunike, hermano menor del ex jugador nigeriano del Barça.

En cuanto a los futbolistas que han defendido la camiseta blanquinegra durante la historia de un club que se apresta a vivir su centenario destacan el mencionado Cristiano Ronaldo; el meta helvético Diego Benaglio; el ex realista Fabio Adriano Rossato o Fabio Coentrao y Carlos Chainho, antiguos jugadores del Zaragoza.