Los jefes de Estado y de Gobierno de América Latina y el Caribe, reunidos en una cumbre en Cancún, México, decidieron ayer la creación de un nuevo bloque regional en el que no participarán ni EEUU ni Canadá.

La nueva organización, anunciada por el anfitrión y presidente mexicano, Felipe Calderón, se perfila como una alter- nativa a la Organizacion de Estados Americanos (OEA), dominada desde su creación por Washington y que tiene su sede en la capital estadounidense.

La nueva estructura organizativa «deberá estimular de forma prioritaria la integración regional, situando el acento en nuestro desarrollo duradero, poniendo en valor nuestros proyectos en la arena internacional y reforzando nuestra posición ante los acontecimientos mundiales de importancia», declaró Calderón durante la lectura de la declaración final de la cumbre, que ha reunido a 32 países , 24 de ellos representados a nivel de jefes de Estado o de Gobierno.

Calderón, que preside la segunda economía de América Latina tras el subcontinente brasileño, había apelado en la apertura de la cumbre, el pasado lunes, a la creación de un bloque regional de este tipo, con vistas a garantizar «la participación efectiva de la región en la economía y en las decisiones mundiales».

Decisión «histórica»

El presidente de Cuba, Raúl Castro, destacó ayer la «trascendencia histórica» de la creación de una Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños y consideró la Cumbre del Grupo de Río prevista en Caracas en 2011 como el momento idóneo para ponerla en marcha.

«No tendría sentido dilatar ese proceso», aseguró el jefe del Estado cubano durante su intervención en la segunda y última jornada de la cumbre, que se ha celebrado en Playa del Carmen, cerca de Cancún (México).

Castro destacó que se están dando las condiciones para avanzar con rapidez hacia una organización «puramente latinoamericana y caribeña» que represente a todos los estados del área, salvo EEUU y Canadá. En esta línea, recordó que la mayoría de los países ya pertenecen a organizaciones internacionales, con independencia de que estén en otras subrregionales, «por lo que no hay razón para que América Latina y el Caribe no cuenten con su propia entidad de concertación política, coordinación económica y de cooperación e integración».

En ese sentido, pidió un esfuerzo a todos los países para definir pronto los estatutos y su forma de operación con el fin de recoger los intereses colectivos que ayuden a una mayor integración y unidad de Latinoamérica y el Caribe.

En la misma línea, el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, mostró su satisfacción por el compromiso firme de la cumbre y recordó que ya es hora «de que nos zafemos definitivamente de la dominación de EEUU».

Pero el discurso de unidad estuvo a punto de romperse tras el nuevo enfrentamiento verbal entre Álvaro Uribe, presidente de Colombia, y Chávez, que acaparó la atención de los medios de comunicación, según informó Efe. El acalorado incidente se inició cuando Uribe equiparó la congelación de las relaciones comerciales entre Colombia y Venezuela con el bloqueo de EEUU sobre Cuba. Uribe le dijo a Chávez: «Sea varón y quédese aquí y hablemos de frente, porque usted a veces insulta en la distancia», a lo que éste respondió con un «vete al carajo».

A este suceso se refirió su homólogo boliviano, Evo Morales, para quien fue Uribe quien provocó a Chávez con una intervención «sorpresiva» que, a su juicio, significa que «los agentes de EEUU vienen a intentar empantanar» la creación de la nueva organización.