Gerlinde Kaltenbrunner hizo cima en el Everest (8.848 m.), su decimotercer ochomil, y se queda a falta del K2 para convertirse en la tercera mujer en hollar las catorce cimas más altas de la tierra, tras Oh Eun-Sun y Edurne Pasaban. Además, Kaltenbrunner hizo cumbre sin usar oxigeno artificial, por lo que también podría ser la primera mujer en hacer los catorce ochomiles sin usar ese tipo de ayuda.

Finalmente, Kaltenbrunner no pudo subir por la exigente ruta que discurre por el Corredor Hornbein, que era su objetivo inicial, y utilizó la ruta Odell de la vertiente norte del Everest. La austríaca estuvo acompañada por su marido, Ralf Djumovits, que entrará desde ahora en el selecto club de alpinistas que han subido los catorce ochomiles sin oxígeno. En concreto, es el undécimo hombre en conseguirlo.

Según las noticias que llegan desde el Himalaya, la ascensión se hizo en condiciones bastante difíciles, ya que el tiempo empeoró considerablemente respecto a los dos días anteriores, con varias expediciones en la cumbre desde la cara sur.

Pedro García, atrapado

Fue, precisamente, la expedición del ordiziarra Pedro García y del gasteiztarra Josu Ortubay una de las grandes damnificadas. Pedro García fue capaz de hacer cima, pero el descenso se complicó mucho y finalmente tuvieron que hacer noche en el Campo 3, a 8.350 metros. Ortubay, por su parte no pudo atacar la cima.

El empeoramiento del tiempo hizo que los montañeros llegasen «extenuados» al Campo 3, según explicó el portavoz José María Ciarreta, que no ocultó su «preocupación» porque «no es una situación buena».

Según sus últimas noticias los montañeros lograron montar una pequeña tienda, tienen una manta y se pudieron hidratar.