Al igual que lo hicieran hace unos días en Iruñea, también Baiona recordará durante sus fiestas el 50 aniversario del hermanamiento de las dos ciudades vascas. El domingo, 1 de agosto, «Día de Iruñea», además de gaiteros y joteros, habrá un invitado especial: la comparsa de gigantes y cabezudos de Iruñea, que este año ha festejado su 150 aniversario. «Un regalo extraordinario», según el alcalde, Jean Grenet, que presentó, ayer, el programa de las fiestas que tendrán lugar del 28 de julio al 1 de agosto.

El primer edil añadió que también contarán con la presencia «inhabitual» -porque en esas fechas se encuentra siempre de vacaciones- de la alcaldesa Yolanda Barcina, a la que elogió por el impulso que juntos dieron hace unos años a las relaciones entre las dos ciudades.

Las tradicionales braderies (ofertas en el exterior de los comercios) del barrio Saint Espirit el lunes y del centro el martes, precederán el primer día festivo que, este año, han dedicado al deporte.

Miércoles deportivo

Así, la mañanera marcha pedestre de Biarritz a Baiona, pasando por Angelu, inaugurará las festividades. Por la tarde, habrá deporte rural, carrera de piraguas, regatas y un partido de rugby entre la selección de Euskadi y un equipo de jugadores locales no profesionales. La pelota estará, como siempre, muy presente en el torneo que se celebra en el trinquete Moderne, donde participarán los pelotaris de más renombre del momento, entre ellos, Martinez de Irujo o Xala. Además, por primera vez, habrá un torneo de pelota femenino en el frontón del Rail bayonés.

Entre las novedades, los representantes municipales destacaron los conciertos que tendrán lugar las tres mañanas festivas a partir de las 10.30, en la plaza de la Libertad; el Gazteszena, dedicado a la música actual, por las noches en la explanada Chaho-Pelletier, la cabalgata de los gigantes de Orai Bat que participarán en el ya consagrado Karrikaldi y las actuaciones de txistularis y trikitilaris en la sala Xokoa del Museo Vasco.

Valores de la fiesta

No faltarán las citas habituales con el rey León en el balcón del consistorio los mediodías, el Dantzazpi, el Baiona Kantuz, las vaquillas, los desfiles del Corso luminoso, el jueves dedicado a los niños, el desafío de Paquito Chocolatero y las animaciones musicales de todo tipo, a cargo de los 65 grupos que actuarán durante los cuatro días.

Grenet reiteró su deseo de que «prevalezca el espíritu de la fiesta». Invitó a que los participantes contribuyan con el pin específico (1 euro) y se comprometan «a respetar y hacer respetar los valores de respeto, convivencia y asistencia que deben regirlas».