Con un minuto de silencio por los fallecidos en los incidentes producidos en Túnez, la selección magrebí y Francia arrancaban su participación en el Mundial que se disputa en Suecia. La selección gala, vigente campeona, no tuvo ninguna dificultad para imponerse por un más que claro 33-19, a pesar de la expulsión de su estrella, Nikola Karabatic.

La primera jornada del Mundial no dejó mucho lugar a las sorpresas. Si acaso, los problemas que tuvo Alemania para derrotar a Egipto por 30-25, o la resistencia de Rumanía, que cedió por un digno 21-27 ante Croacia, uno de los favoritos a estar en el podio final.

En uno de los choques más igualados y entretenidos de este primer día grande del Campeonato del Mundo, Polonia sudó tinta para doblegar por 35-33 a Eslovaquia. Mientras, Dinamarca dio la paliza de la jornada, al machacar a Australia por 47-12.