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Triunfo en San Mamés

Chocolate con «biper gorri»

El Athletic consigue su primera victoria del año, aunque tuvo que sufrir antes de celebrarla. Los rojiblancos se adelantaron rápido, pero las lesiones y la reacción del Racing tras el descanso mantuvieron vivo al conjunto cántabro hasta el último momento.

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ATHLETIC 2

RACING 1

Amaia U. LASAGABASTER

La cuarta también vale para la vencida. Tras tropezar ante el Deportivo, echar en falta una gotita de fortuna frente al Barcelona y respirar de alivio contra el Málaga, el Athletic consiguió su primera victoria de la temporada. Satisfactoria, como todas, aunque hubo que sufrir antes de poder celebrarla. Como ese chocolate que en Ezpeleta condimentan con biper gorri para alegrar el paladar. O para soltar alguna lagrimilla, según los gustos.

También el partido de San Mamés resultó especialmente sabroso para algunos por aquello de la emoción, pero con demasiado picante para la mayoría. Y es que la segunda parte, con el Athletic sin su principal referencia ofensiva y varios jugadores con problemas físicos, se hizo eterna, sobre todo después de que Iván Bolado anotara el amenazador gol del Racing. Pero se ganó y el Athletic conquistó la mitad del objetivo que se ha marcado para este ecuador de la Liga: concluye la primera vuelta con 29 puntos -la segunda mejor puntuación de Caparrós, sólo superada por los 30 del pasado año-, en puntuación europea y con la confianza definitivamente recuperada para afrontar un calendario teóricamente asequible que, en las tres próximas semanas, traerá a Hércules y Sporting a San Mamés y que puede ratificarle definitivamente en el grupo de candidatos serios a acabar la Liga en zona continental.

Para conseguirlo, deberá repetir a menudo lo que hizo anoche hasta las nueve e intentar evitar lo que sucedió a partir de esa hora. Es decir, saltar al césped con el cuchillo entre los dientes y la puntería afinada, pero tratando en adelante de que el rival no encuentre resquicios por los que reaparecer. Cierto es que la dureza, permitida, con la que se empleó el Racing tuvo algo que ver en la reacción de los verdiblancos: Aitor Ocio se tuvo que retirar a los diez minutos de la reanudación después de que una dura entrada en el primer tiempo le hubiera dejado el tobillo maltrecho y Toquero o Javi Martínez también recibieron de lo suyo. Aunque el golpe, nunca mejor dicho, definitivo había llegado antes, con un codazo de Henrique a Llorente a la altura de las cervicales, que provocó que el delantero -que incluso fue trasladado a un centro hospitalario para realizarle algunas pruebas- aguantara a duras penas hasta el descanso. Pero eso no debe ocultar que el Athletic sufrió demasiado sin su principal referencia ofensiva. Se esforzaron Toquero, Muniain e Igor Martínez, pero no tener a Llorente en el campo, será por la falta de costumbre, despista demasiado al equipo.

Al Racing, además, le tocaba reaccionar tras un primer tiempo en el que había sido prácticamente barrido por su anfitrión. Al menos en la primera media hora, de absoluto huracán rojiblanco, a lo que contribuyó la rapidez con la que llegaron los goles. Javi Martínez, otra vez de espaldas, cabeceó una falta botada por David López a los siete minutos de partido. Sólo tres después era Iker Muniain el que remataba con todo el alma para culminar una bonita contra a cargo de Gurpegi y Toquero. Llorente, cabeceando muy cerca del palo, o David López, con una falta que se estrelló en la cruceta, pudieron haber dejado sentenciado el choque.

No lo hicieron y a partir de la media hora empezó a lamentarse. Porque una escapada de Munitis que remató por encima del larguero ejerció de pistoletazo de salida para la reacción de los cántabros que, antes del descanso, también pudieron acortar distancias con un disparo de Kennedy desde más de 30 metros que repelió el larguero o un remate cruzado de Rosenberg que entre Iraioz y Aitor Ocio despejaron como pudieron por línea de fondo.

Las angustias se mantuvieron tras el descanso. El Racing no disfrutó de excesivas ocasiones claras, pero entre que el balón fue suyo casi en exclusiva y que Kennedy convierte en peligro prácticamente todo lo que toca, la segunda parte se vivió con un nudo en la garganta. Sobre todo el último cuarto de hora, después de que Iván Bolado cabeceara el 2-1.

El Athletic, por suerte, se las arregló esta vez bastante bien con ese otro fútbol que tanto le gusta a su técnico y el partido acabó con algún susto, pero con satisfacción final.

«Tenemos que seguir peleando con ambición, pero hay muchísima igualdad»

Joaquín Caparrós acabó más contento con el resultado que con lo sucedido sobre el césped de San Mamés. O, más concretamente, con todo lo sucedido en la Catedral. Y es que el técnico reconoció que tras un primer tiempo de superioridad, a su equipo le tocó sufrir tras el desceanso.

«Hemos jugado treinta minutos a un muy buen nivel -recordó-. Ellos han tenido después alguna ocasión, pero también nosotros, con un remate de Fernando y el tiro de David al palo. En la segunda parte no hemos estado bien, pero ellos tampoco han generado demasiadas ocasiones. Es verdad que han tenido muchísima más posesión, pero no han disfrutado de muchísimas ocasiones», insistió. Recordó, además, que la segunda parte había estado mediatizada por las lesiones de Fernando Llorente y Aitor Ocio. «También teníamos a Koi con alguna pequeña molestia y teníamos que apurar mucho con los cambios».

Pese a todo, el técnico rojiblanco acabó «contento». Por muchos motivos. Porque los tres puntos de anoche «hacen bueno el empate de Málaga», porque la lesión de Llorente «es sólo una contusión» pese a lo mal que lo pasó sobre el campo el delantero tras recibir el codazo, o por la buena actuación de Borja Ekiza. «Es una muy buena noticia que un chaval de nuestra cantera haya dado muy buen nivel -destacó-. Tenemos que felicitar a Borja, porque no es fácil pasar de Segunda B a jugar en Málaga, donde hizo un buen partido, y ahora en San Mamés, con la tensión y la responsabilidad que supone eso para un canterano». Reconoció el utrerano, de todos modos, que «por una cosa o por otra este año no estamos teniendo buena suerte con los centrales». No en vano el Athletic acabó ayer el partido con la séptima pareja diferente en el centro de la defensa.

El técnico, por otro lado, también concluye la primera vuelta satisfecho con los 29 puntos que ha alcanzado el Athletic. Aunque sea uno menos que hace un año cuando, a final de temporada, se le acabó escapando la clasificación europea. Idéntico objetivo al actual, aunque Caparrós prefiere pensar que «el objetivo es el siguiente partido, que vamos a afrontar con ambición. Hay mucha igualdad, así que vamos a sufrir muchísimo, pero vamos a intentar seguir en la misma línea y a ver si al final le damos una alegría a nuestra afición. Vamos a seguir peleando, pero hay muchísima igualdad», insistió.

Javi Martínez, por su parte, se mostró feliz por su segundo gol consecutivo y reconoció que el choque «se nos ha puesto muy bien al principio, pero los partidos duran noventa minutos para bien y para mal. Ellos no se han venido abajo, han apretado muchísimo y en una jugada a balón parado nos han metido el miedo en el cuerpo, aunque creo que habría sido bastante injusto que nos hubieran empatado». A.U.L.

El partido acaba con el séptimo dúo de centrales

23 partidos oficiales y siete parejas de centrales. Tras alinear las conformadas por San José-Amorebieta, San José-Ustaritz, San José-Ocio, Ocio-Ustaritz y San José-Ekiza, Joaquín Caparrós alineó ayer a Ocio y Ekiza. La lesión del gasteiztarra originó la séptima: Ustaritz-Ekiza.

Seis jornadas sin dejar la portería a cero

El Athletic deslumbró con su actuación defensiva ante el Barcelona, pero los números siguen siendo malos para los rojiblancos, que acumulan seis jornadas ligueras sin dejar su portería a cero. Sólo lo han hecho en cinco ocasiones a lo largo de toda la primera vuelta.

Ocio y Llorente terminan en la enfermería

El parte de bajas supuso lo peor de la noche para el Athletic. Fernando Llorente recibió un fuerte codazo en las cervicales y llegó al descanso a duras penas. Aitor Ocio, objeto de una dura falta en el primer tiempo, abandonó en el minuto 55 con problemas en el tobillo.

Primer gol de la temporada para Iker Muniain

Iker Muniain ya ha estrenado su casillero de goles. La pasada campaña acabó como el cuarto goleador del equipo, gracias a los cuatro tantos que marcó en Liga -se mantiene como el goleador más joven de la competición- y los dos que firmó en Europa League.

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