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Jabi Amorrortu, Asier Imaz Miembros de la Federación de Industria de LAB

¿Gemma Zabaleta? No, no está

Hoy 49 trabajadores y trabajadoras tendrían empleo, y mañana la siguiente generación (esa que dicen que se puede perder) tendría donde trabajar. Este país tiene riqueza, pero hay que defenderla

Se puede hablar de las necesidades de los y las trabajadoras sin escuchar a los y las trabajadoras? La Consejería de Empleo y Asuntos Sociales del Gobierno Vasco parece estar empeñada en que sí. Y le debe generar semejante desgaste y esfuerzo a este organismo público que cuando recibe de un comité de empresa una petición de reunión urgente parece que no entiende qué quiere decir.

La próxima vez, señores y señoras de esta consejería, sería interesante que al menos se contestara a semejante petición, aunque no se tenga el mínimo interés en escuchar los problemas de los y las trabajadoras, aunque sólo sea por respeto.

LAB ya avisó que los EREs seguirían. No de «suspensión de empleo» principalmente, ahora serían de «rescisión de empleo», esto es, para amortizar miles de puestos de trabajo. El caso triste que hoy nos ocupa es Recticel Ibérica, antigua ICOA, fábrica histórica de Legutio absorbida por esta multinacional apenas hoy hace cinco años.

Cinco años han bastado para destrozar las condiciones laborales del colectivo, ordenar la producción en otras plantas del grupo y cerrar. Eficaces sí que son estas multinacionales.

Todo este proceso lo han vivido los y las trabajadoras desde la más absoluta soledad institucional. Nadie duda que se trate de un atropello social y, por supuesto, está más que claro que no se dan causas que lo justifiquen (se trata de una multinacional con grandes beneficios, y que no duda en repartir jugosos dividendos), lo que dudan los trabajadores y trabajadoras de Legutio es si merece la pena jugarse su indemnización o jubilación en una resolución del Ministerio de Trabajo en Madrid.

Y ya sabemos todos cómo se las gastan en este órgano, no hay más que ver las colas del paro.

Esta era la petición que se le quería hacer a Gemma Zabaleta: garantías ante Madrid de que este expediente no iba a ser aprobado. Garantías para que los y las trabajadoras no tuvieran que participar en un circo cuyo único fin sea divide y vencerás.

Dividir y enfrentar a las plantillas de los diferentes centros, dividir y enfrentar a los y las trabajadoras de Legutio ofreciendo miserias a cambio de la renuncia de su puesto de trabajo.

Señora Zabaleta, el puesto de trabajo es un bien social, es un valor para que la sociedad avance. Resumir este activo económico-social en 20 mensualidades para un trabajador o trabajadora es no querer asumir responsabilidad política sobre lo que le está ocurriendo al pueblo. Usted es la Consejera de Empleo, cumpla con su responsabilidad, al menos hasta que juntéis la valentía suficiente como para llamar a este organismo como se merece, Consejería de Empresa.

49 trabajadores y trabajadoras votaron a favor o en contra del ERE. Ninguna de esas personas ha votado libre, todos y todas lo han hecho desde su incertidumbre personal y aún así 22 han preferido jugarse su indemnización o jubilación a vender su puesto de trabajo. Todos y todas han votado en la mayor soledad institucional.

Aprended de estos 22 trabajadores y trabajadoras, esta es la fuerza y el orgullo que tiene este país para avanzar. Si el Gobierno Vasco hubiera hecho su trabajo nada de esto hubiera ocurrido.

Hoy 49 trabajadores y trabajadoras tendrían empleo, y mañana la siguiente generación (esa que dicen que se puede perder) tendrían donde trabajar.

Este país tiene riqueza, pero hay que defenderla.

De aquí en adelante, y aunque sea en periodo electoral, para hablar de trabajadores y trabajadoras, mejor si les escucháis.

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