Derrota en Madrid
La gasolina no da para estos sprints
El Baskonia jugó bien, pero no pudo con el ritmo de Llull y Rodríguez y el acierto de Reyes y Suárez.
Arnaitz GORRITI I
El Caja Laboral Baskonia compitió a buen nivel ante el Real Madrid, pero no le quedó otra que rendirse a un cuadro merengue con un punto más de chispa y velocidad. Las ausencias de Lampe -el mánager general del Baskonia, Félix Fernández, anunció la llegada del polaco para el próximo 1 de febrero- y Ribas -asumiendo que Walsh, que ayer jugó 10 minutos donde sumó un rebote y una asistencia, es un «parche»- son una losa muy pesada que impide a los de Ivanovic tener el fondo preciso para envites de este calibre.
Y falta que hace, sobre todo si se le deja correr al Real Madrid, con dos bases como Sergio Rodríguez y Sergi Llull, tan propensos a acelerar los partidos. Si estos dos directores de juego logran manejarse a campo abierto, cosa que ayer sucedió, principalmente al inicio y en el tercer cuarto, hace falta una reserva buena física para hacerles frente. Y el Caja Laboral Baskonia, a día de hoy, carece de esa reserva.
En cualquier caso, poco se le puede reprochar a la escuadra gasteiztarra. Su defensa paró en seco a Carroll y Singler, y tuvo además la fortuna de que Mirotic se lesionase -el hispano-montenegrino sufrió un esguince en el primer cuarto-. Pero el Real Madrid cuenta con un fondo de armario extenso, y compensó sus ausencias con el buen partido de sus bases -15 asistencias entre Rodríguez y Llull, solo 3 pérdidas, y 33 de valoración-, amén del tino que mostraron Suárez -17 puntos y 6 rebotes para el Chimpa- y Felipe Reyes -18 tantos, 10 rebotes-.
Roto en el tercer cuarto
Por parte gasteiztarra, destacó el «doble doble» de Teletovic, después de haber sido duda hasta el último instante. El bosnio compensó los problemas de faltas de Milko Bjelica con 14 tantos y 13 rebotes. Junto con el ala-pívot, Brad Oleson fue el mejor elemento de los de Ivanovic, máximo anotador con 18 tantos. Prigioni también colaboró con 8 tantos, 5 asistencias y 5 rebotes, amén de los 10 puntos y 5 asistencias para San Emeterio.
Tras caer por la mínima, 42-41, al descanso, el Baskonia llegó a ponerse seis puntos por delante, 49-55, en el tercer cuarto. Pero el Real Madrid respondió con un parcial de 19-5 gracias a la velocidad de Llull. Los gasteiztarras trataron de responder con acciones de Heurtel, con demasiadas prisas y poco juego en equipo. El partido se descosía por las urgencias gasteiztarras, cosa que la pareja Sergio Rodríguez-Felipe Reyes aprovechó para finiquitar el duelo.
Más que por el juego o por el resultado, Dusko Ivanovic se mostró cabreado por la derrota después de que el duelo hubiera discurrido «como habíamos esperado».
El técnico de Bijelo Polje se quejaba del «egoísmo» de sus jugadores en el tercer cuarto. «Pensábamos que podíamos parar al Real Madrid, y hemos estado en el partido mientras jugamos en equipo. Pero luego fuimos egoístas y tomamos opciones un poco raras. Además ellos han acertado muchísimo», resumió.
Por su parte, Brad Oleson, uno de los jugadores más destacados del bando baskonista, dijo que en líneas generales «hemos jugado un buen partido». No obstante, el escolta hispano-alaskeño añadía que «en el tercer cuarto permitimos al Real Madrid tomar cierta ventaja y por ahí se nos fueron las opciones de victoria».
«No sé por qué pudo ser, pero durante el tercer período les dejamos correr y de esta manera ellos lograron una serie de canastas fáciles. A partir de ahí, no conseguimos volver para disputarles el partido». A. G.
