GARA > Idatzia > Mundua

Nikolic resucita viejos fantasmas en los Balcanes al negar el genocidio de Srebrenica

GARA | BELGRADO

El nuevo presidente de Serbia, Tomislav Nikolic, ha sacudido los Balcanes al negarse a calificar de «genocidio» la masacre cometida por las tropas serbias en 1995 en Srebrenica, en Bosnia, y ha reavivado los temores a un retorno a la retórica ultranacionalista en una región que continúa marcada por la guerra de los años 90.

«No hubo genocidio en Srebrenica. En Srebrenica tuvieron lugar graves crímenes de guerra por parte de algunos serbios que han de ser encontrados, juzgados y castigados», señaló Nikolic en una entrevista transmitida por la televisión de Montenegro unas horas antes de su toma de posesión en jueves.

El líder musulmán de la Presidencia tripartita de Bosnia, Bakir Izetbegovic, lamentó sus palabras, que consideró «una fuente de nuevas tensiones» y un insulto a los supervivientes.

«Nikolic demuestra que no comprende cuál es el deber del presidente de un país que aspira a ingresar en la UE», sostuvo la activista serbia por los derechos humanos Natasa Kandic. «Él debe reconocer los veredictos de los tribunales internacionales que inequívocamente han determinado que en Srebrenica se cometió un genocidio», agregó.

Belgrado logró en marzo la condición de candidato a la adhesión a la UE. Ayer Bruselas subrayó que en Srebrenica se cometió «genocidio» y rechazó categóricamente todo intento de «reescribir la historia», al tiempo que reiteraba que los líderes políticos de los Balcanes deben mostrar constantemente «su adhesión al espíritu de cooperación y reconciliación en la región».

Las declaraciones de Nikolic pusieron inmediatamente en duda la sinceridad de su ruptura con su pasado ultranacionalista. Antes de crear su propio partido en 2008, Nikolic, que fue viceministro en el Gobierno de Slobodan Milosevic, fue la mano derecha del ultranacionalista Vojislav Seselj, juzgado por crímenes de guerra por el TPIY. El presidente serbio había asegurado haberse convertido en un nacionalista conservador proeuropeo.

«En esta región, los fantasmas del pasado aún nos persiguen y persiguen a Nikolic como una sombra», señaló la analista serbobosnia Tanja Topic.

La frágil reconciliación entre los antiguos enemigos en los Balcanes conseguida durante los dos mandatos de Boris Tadic podría verse afectada.

Algunas de sus declaraciones en torno a la «Gran Serbia» y a la guerra serbo-croata antes de su elección provocaron críticas unánimes en Croacia, y la llegada de Nikolic a la Presidencia de Serbia hace temer también una radicalización de la política de Belgrado en relación a Kosovo.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo