Bridgestone presentó ayer desde su página web los resultados económicos de los tres primeros trimestres después de que su filial española, Bridgestone Hispania, planteara a los sindicatos un ERE de extinción para 442 trabajadores en el Estado español, lo que supone la eliminación del 12,5% de su plantilla, formada por 3.544 efectivos..

Del total de trabajadores afectados por este ERE de extinción, 184 pertenecen a la planta de Basauri y otros 32 a la de Usansolo, ambas en Bizkaia. Además, la empresa eliminará 109 empleos en la fábrica de Burgos, dedicada a neumáticos de turismo, y 117 puestos en Cantabria, especializada en neumáticos agrícolas.

El crecimiento de las ganancias de la corporación nipona en un 41,4% respecto al mismo periodo de 2011 anunciado ayer se debe principalmente, según la empresa, a que el pasado año sus resultados se vieron afectados por el impacto del terremoto y posterior tsunami del 11 de marzo en Japón.

La cifra de negocio de esta multinacional, que aspira a convertirse en líder indiscutible del sector del neumático, se situó en 2,22 billones de yenes entre enero y setiembre (21.700 millones de euros), lo que supone un leve descenso del 0,36% en relación con el mismo periodo del ejercicio precedente. Para el conjunto del año, Bridgestone espera obtener un beneficio neto de 172.000 millones de yenes (1.676 millones de euros), con un crecimiento del 67% respecto al ejercicio anterior. La cifra de negocio subirá un 3,5%, hasta 3,13 billones de yenes (30.500 millones de euros).

Pese a estos buenos resultados, la dirección de la multinacional justificó la presentación del ERE en el Estado español en que «la caída de la demanda de neumáticos se prolonga ya más de un año y hasta ahora se había capeado con EREs de suspensión de contratos, pero la situación se ha deteriorado y obliga a un ajuste de plantilla». No obstante, matizó que, pese a los despidos, las cuatro fábricas seguirán abiertas.

Críticas de ELA y LAB

Los sindicatos ELA y LAB expresaron ayer su rechazo al ERE presentado por Brigestone para la extinción de 216 contratos en sus plantas de Basauri y Usansolo, y anunciaron la celebración de movilizaciones para exigir su retirada. Ambas centrales denunciaron también a los sindicatos CCOO y UGT, mayoritarios en el comité intercentros, por haber venido firmando en los últimos cuatro años todos los expedientes de regulación planteados por la empresa, lo que en su opinión ha allanado el camino para el nuevo ERE.

Por su parte, CCOO y UGT han convocado para hoy asambleas de afiliados al objeto de analizar las decisiones de la dirección de Bridgestone.