GARA > Idatzia > Iritzia> Kolaborazioak

Bikendi Barea y Aitziber Sarasola Parlamentario y parlamentaria de Bidu Nafarroa

Renta básica... y más

UPN repite la misma letanía: gobernar es priorizar... pero se prioriza rematadamente mal en favor de unos pocos y en contra de la mayoría

Hace escasos días la Plataforma Por la Renta Básica expuso en la Comisión de Políticas Sociales su opinión sobre las consecuencias y perjuicios que ha acarreado la implementación de la Renta de Inclusión Social (RIS); esta reflexión esta recogida en el documento «Renta Básica... y más». Sus palabras fueron demoledoras.

Palabras acordes con el tiempo en el que vivimos, época de gobiernos sometidos al déficit, días en que muchas ciudadanas y ciudadanos malviven entre el rigor presupuestario y la severidad de los ajustes económicos, algunos, y no pocos, caminan por la interminable senda del desempleo a la que nos han guiado políticas especulativas y neoliberales.

La Plataforma en su análisis esbozó una situación dramática en la RIS, una situación que se genera cuando los gobiernos ofrecen el Estado del Bienestar como sacrificio a la deuda. Se genera cuando Europa y una parte de sus gobiernos se doblegan ante las finanzas y la Troika, cuando las distintas administraciones hacen vasallos de la Banca a sus ciudadanos y ciudadanas. El Gobierno de Navarra se encorva e intenta ponerse en pie apoyándose en los recortes y debilitando lo público.

Sus «reajustes» se extienden y la sociedad civil y sus organizaciones chocan contra las prioridades que la macroeconomía dicta y, siempre salen perdiendo; UPN repite la misma letanía: gobernar es priorizar, pero... se prioriza rematadamente mal en favor de unos pocos y en contra de la mayoría.

La Plataforma e infinidad de agentes y organizaciones demandan soluciones para superar esa injusta priorización, para aderezar su receta institucional para salir de la crisis, cuyos ingredientes son aceite de ricino y jarabe de palo con una razón aritmética perversa, menos que tienen más y más que tienen menos.

Las negaciones de las políticas sociales que sistemáticamente realiza el Ejecutivo no se pueden justificar desde el rigor y la austeridad económica y presupuestaria. Es injustificable la severidad y dureza que percuten una y otra vez sobre las cabezas de los sectores más vulnerables. Es inaceptable el rigor insolidario hacia los más desfavorecidos y la austeridad empujando a la justicia social y la cohesión.

Las políticas de corte social son de recortes y ayudan a la derecha más neoliberal en su intención; noquear el Estado de Bienestar para posteriormente levantar los restos de la lona privatizándolos.

El problema de la Renta de Inclusión Social se gestó con un Gobierno que empezó bicéfalo y acabó esquizofrénico y en este proceso de matrimonio de conveniencia se trasformó la Renta Básica en una criatura siamesa de distintas caras: Inclusión, empleabilidad y excepcionalidad.

Solamente como hipótesis; la criatura no esta tan fea y los actuales marcos normativos son convenientes e incluso ejemplares pero, sin la debida consignación presupuestaria, se quedan en menos que nada.

Los datos y las cifras que expuso la Plataforma en su Comparecencia sobre el número de solicitudes que se han denegado, el número de ciudadanos a los que se ha expulsado del sistema y las personas que se encuentran en el umbral de la pobreza hace que la reflexión sea imprescindible y urgente. La clave y la obligación actual de todas y todos es obviar el pasado y construir futuro, la grave situación así lo requiere, no es tiempo de enrocarse en lo que se hizo sino en lo que se puede hacer.

Sobre los deberes a realizar existe un clamor social claro e inequívoco y nadie puede permanecer ajeno al mismo, las Organizaciones y Agentes, en este caso la Plataforma Por la Renta Básica, presentan sus propuestas y reflexiones, ahora la obligación toca a la puerta del Parlamento y las soluciones están en su Debe.

Los grupos parlamentarios tenemos herramientas para paliar esta situación, podemos y debemos articular mayorías para pasar esta página restrictiva de la RIS, pero, hagámoslo con rapidez y mirando a las personas desalojadas del sistema que no pueden esperar y a los plazos eternos que no se cumplen.

Nuestro modelo de referencia es una Renta Universal de Ingresos Mínimos, pero volver a la senda de la Renta Básica anterior modulada por las proposiciones de la Plataforma es un paso previo necesario para, al menos, empezar a encarar el problema.