La reorganización de Udalbiltza suma ya el apoyo de 1.174 electos
El pasado junio, electos municipales de toda Euskal Herria se reunieron en el Baluarte de Iruñea para debatir sobre la reorganización de Udalbiltza. A raíz de aquel encuentro se puso en marcha un grupo de trabajo que ayer ofreció un balance de la tarea realizada hasta la fecha. Por ahora son 1.174, de un total de 6.543, los electos que han suscrito el manifiesto de apoyo a la institución nacional. Una cifra que esperan incrementar en los próximos meses.
Imanol INTZIARTE | DONOSTIA
La reorganización de Udalbiltza continúa dando pasos. Igor Eguren, alcalde de Ordizia; Daniel Olzomendi, alcalde de Izpura; e Iratxe López de Aberasturi, concejal de Gasteiz, son tres de los integrantes del grupo de trabajo creado en junio con este fin, tras la asamblea celebrada en el Baluarte de Iruñea.
Según los datos que ofrecieron ayer en su comparencia en Donostia, hasta la fecha 1.174 electos municipales de Euskal Herria han expresado su adhesión a la reorganización de la institución nacional. Suponen el 17,94%, de un total de 6.543 alcaldes y concejales.
Por territorios el reparto es muy desigual y oscila entre el 40,51% de Gipuzkoa y el 0,84% de Nafarroa Beherea. Entre medio están Bizkaia (32,28%), Araba (24,51%), Nafarroa (14,97%), Lapurdi (3,27%) y Zuberoa (1,85%).
De los 685 municipios vascos, 318 cuentan hasta la fecha con al menos un representante que se ha sumado ya a esta iniciativa (46,42%). Bizkaia (92,92%) y Gipuzkoa (84,09%) ofrecen los porcentajes más altos, frente al 6,98% de Zuberoa y el 9,76% de Nafarroa Beherea.
Los integrantes de este grupo de trabajo expresaron su esperanza de que las cifras sigan creciendo durante los próximos meses, antes de que tenga lugar una asamblea constituyente de la cual aún no se ha hecho pública la fecha.
Un derecho, no una obligación
«Todas las y los cargos electos municipales de Euskal Herria tienen derecho a participar en la reorganización de Udalbiltza. Ninguna persona puede ser discriminada por por razón de su ideología, sexo, religión, origen o cualquier otro motivo. Pero ese proceso también es absolutamente voluntario. No puede obligarse a nadie a ser miembro de Udalbiltza», apuntaron.
En ese sentido, indicaron que la representación institucional responde a diferentes sensibilidades, por lo que entre los cargos electos municipales «hay muchos que se sienten españoles y franceses y no tienen interés en participar en el proceso de vertebración institucional de Euskal Herria. Respetamos su decisión. Pero aún quedan muchas y muchos entre quienes reconocen la existencia de Euskal Herria que todavía no se han adherido». Así que es a ellos a quien especialmente se dirigen.
Al margen de esta campaña, se han puesto en marcha otras tres iniciativas. La primera, organizar un proceso de debate entre los electos que se han adherido, para conocer su opinión sobre Udalbiltza y sobre el trabajo que debe desarrollar en el futuro. La segunda, hacer una fotografía multisectorial del país, analizando diversos indicadores que permitan realizar un diagnóstico y decidir qué proyectos son prioritarios, tal y como sucedió en la anterior etapa con el programa Zuberoa Garatzen. La tercera iniciativa es poner en marcha una ronda de reuniones con diversos agentes sociales.
Los impulsores de la reorganización de Udalbiltza defienden la necesidad de una institución nacional en un contexto en el que Europa occidental vive importantes movimientos soberanistas. Igor Eguren destacó en este sentido el próximo referéndum de Escocia, los éxitos electorales de los independentistas en Flandes o la movilización de la Diada en Catalunya. Al mismo tiempo, en Euskal Herria se recuerdan los 500 años de la conquista del Reino de Navarra, las fuerzas abertzales copan casi dos tercios del Parlamento de Gasteiz y en Ipar Euskal Herria la reivindicación del reconocimiento institucional propio ha logrado sus mayores cotas de adhesión.
Frente a ello, el alcalde de Ordizia denunció las actitudes de los gobiernos español y francés, que en el ámbito socio-económico apuestan por los «recortes de derechos sociales y servicios públicos básicos» y en el ámbito político abogan «por el mantenimiento de la represión».
En este marco, Iratxe López de Aberasturi apuntó que es el momento de trabajar en torno a los cinco principios aprobados hace doce años en la asamblea celebrada en el Euskalduna de Bilbo: Reivindicar que Euskal Herria es una nación, coadyuvar a su vertebración institucional, impulsar la construcción nacional, facilitar la construcción de relaciones entre los municipios de todos los territorios y propugnar que Euskal Herria funcione como nación en el ámbito internacional. «No reivindicamos la creación de nada nuevo, sino la unificación constructiva de las dos expresiones que han existido durante doce años». I.I.
