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Los vecinos de Txomin afectados por las obras del río se realojarán en Morlans

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Imanol INTZIARTE | DONOSTIA

El Ayuntamiento de Donostia y el Gobierno de Lakua han alcanzado un acuerdo para la cesión de viviendas en Morlans durante las obras que se van a llevar a cabo en Txomin Enea para minimizar el riesgo de inundaciones.

Las obras provocarán el derribo de varias edificaciones y hasta que se construyan las nuevas esas familias vivirán en 70 pisos cedidos por el Ejecutivo autonómico. El Ayuntamiento abonará los alquileres y los vecinos pagarán los gastos de consumo y comunidad. Los primeros realojos se producirán en enero.

El concejal de Urbanismo, Ricardo Burutaran, recordó que esta será la segunda actuación que el Ayuntamiento lleve a cabo en Txomin-Enea de cara a prevenir el riesgo de inundaciones, después de que en setiembre se concediese la licencia para comenzar las obras del convento de Kristobaldegi. Este edificio quedará integrado en la zona prevista para el parque fluvial, una zona que puede ser inundable. Se desplazará hacia atrás y se construirá un ala más pequeña, eliminando parte de las huertas y levantando un nuevo muro.

El pasado 30 de noviembre el Ayuntamiento y la Agencia Vasca del Agua (URA) firmaron un convenio para sustituir el puente de Txomin, que da acceso a las viviendas de los militares y al parque de Ametzagaina. La obra se financiará al 50%, con un coste para cada parte de unos 2.430.000 euros.

Burutaran recordó que, además, se mantiene el proyecto de construir en el barrio «más de 800 viviendas, la mitad de ellas de protección oficial en la primera fase de las obras».

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