A primera hora del domingo, primer día de la semana de trabajo en Irak, el cuartel general de la Policía iraquí fue objeto de una ataque que provocó 30 muertos y 88 heridos. Un kamikaze, al volante de un vehículo modificado con la apariencia de un coche de la policía, hizo estallar un explosivo cuando paró en el puesto de control del principal acceso al complejo policial, un edificio rodeado con paredes de hormigón antiexplosiones,

Otros tres atacantes, vestidos con uniformes de policía, intentaron introducirse en el interior del edificio a la vez que lanzaban granadas, antes de ser abatidos.

«He visto un vehículo parar en el control de la entrada principal y la Policía comenzó a inspeccionarlo. De repente hubo una enorme explosión, fue terrible. Vi mucha gente muerta que estaba al volante de sus vehículos», relató un testigo.

Tanto el cuartel como las tiendas y viviendas cercanas resultaron muy dañadas por la detonación y las autoridades bloquearon todos los accesos al centro de la ciudad.

«Muy organizados»

Según el general Natah Mohammed Sabr, jefe de los servicios de urgencia de Kirkuk, el atentado causó 30 muertos, de ellos cuatro policías. Entre los 88 heridos se encuentra el general Sarhad Qader, que está al mando de las fuerzas policiales en la periferia de Kirkuk. Los asaltantes «querían claramente liberar a los prisioneros. Estaban muy organizados», afirmó este oficial desde un hospital de Erbil, en el vecino Kurdistán, donde era atendido.

«La Policía se interpuso y los matamos a todos», añadió. El ataque no fue reivindicado pero los insurgentes suníes, incluida Al Qaeda en Irak, atacan habitualmente a las fuerzas de seguridad iraquíes.

Poco después del atentado en Kirkuk, al menos tres iraquíes, murieron y diez resultaron heridos en distintos ataques en varios puntos de Irak. Así, un grupo armado ametralló a uno de los dirigentes de las milicias progubernamentales Consejos de Salvación en la ciudad de Samara

En otro incidente, un civil pereció y otro resultó herido por los disparos de un grupo armado cerca de su vivienda en la zona de Al Qatun, al oeste de la ciudad de Baquba. En un ataque similar, un civil falleció en la zona de Al Taremia.