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CRISIS EN UPN

Catalán y Barcina rompen y se disputan el liderazgo de UPN

El presidente del Parlamento anuncia su candidatura tras dar por roto el acuerdo de mínimos al que llegaron hace apenas tres semanas, y da el paso en el momento más bajo de la presidenta

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Aritz INTXUSTA | IRUÑEA

Alberto Catalán ha decidido disputar la Presidencia de UPN a Yolanda Barcina. Quiebra así la leyenda que afirmaba que el actual presidente del Parlamento siempre amagaba, pero no pegaba. El pacto que cerraron hace apenas tres semanas ha acabado en papel mojado tras una lluvia de acusaciones mutuas. La noticia saltó primero en las redes sociales, pero no fue difundida por el servicio de prensa del partido, que ayer afirmaba desconocer el origen de la filtración. UPN tuvo que confirmar que el vicepresidente ha dado un paso adelante, pero se negó a realizar ninguna valoración de los motivos de la ruptura, todo ello a 40 días del congreso.

El pacto saltó por los aires tras un mensaje que Catalán envió a los militantes del partido y en el que aparecía el siguiente texto: «Hola. Quiero que sepas que después de escucharos a muchos de vosotros, responsables locales, etcétera, y de meditarlo mucho, por responsabilidad y pasión por UPN y Navarra he decidido presentar mi candidatura en el congreso de marzo para presidir nuestro partido. Como siempre a tu disposición, Alberto Catalán».

La disputa entre Catalán y Barcina excede de lo personal. Incluye una confrontación ideológica entre los que apuestan por mantener el status quo a través de afianzar relaciones con el PSN y los militantes más afines al PP. Barcina, líder de la segunda corriente, lleva meses siendo criticada abiertamente por los más radicales de entre quienes apuestan por Catalán, que llegan a volver a acusarla de «ser de Burgos». La disensión arrancó con la expulsión del PSN del Gobierno y cobró fuerza después del escándalo de la dimisión de Jesús Pejenaute, exasesor personal de Barcina.

Catalán, cabeza visible del grupo de los «corellanos», llevaba meses preparando el asalto al poder, trabajándose a las bases de Erribera pueblo a pueblo, en un ámbito local en el que Barcina nunca ha tenido buen encaje. Sin embargo, la presidenta logró parar sus aspiraciones en una reunión a la que también acudió el expresidente Miguel Sanz. Barcina doblegó a sus rivales jugando fuerte y les llegó a amenazar con tirar el Gobierno si le obligaban a vivir una bicefalia al estilo del PNV, con un líder al frente de la Diputación y otro en la sede de la plaza Príncipe de Viana.

Pero el pacto al que llegaron, en realidad, no satisfacía a ninguna de las dos partes. Barcina seguiría como presidenta del partido, pero tendría un vicepresidente casi plenipotenciario. El pacto entregaba tantos poderes a Catalán que incluso tenía la capacidad de escoger quiénes iban en las listas. A todas luces, en un eventual escenario de elecciones anticipadas, la crisis interna de UPN no podría más que agravarse. Catalán no esconde su ambición de ser presidente de Nafarroa y el hecho de que Barcina continuara como presidenta del partido aun habiendo dejado el Gobierno era sumamente molesta.

El domingo 27 de enero Catalán apareció en una entrevista en un medio afín criticando la gestión de Barcina, poniendo en duda indirectamente su «honestidad» y hablando de la posibilidad de elecciones anticipadas. Al día siguiente se produjo una gran bronca en la Ejecutiva del partido, que recogió «Diario de Navarra». Catalán retó a Barcina a romper el pacto.

En esa entrevista del día 27, el periodista preguntó a Catalán sobre cuántas veces había oído la cantinela «Catalán amaga, pero no pega». El ahora aspirante a dirigir UPN tuvo que reconocer que muchas. Esta frase se popularizó sobre todo a raíz de que hace cuatro años el político corellano decidiera dejar vía libre a Barcina para dirigir el partido tras la marcha de Sanz. En ese momento, Catalán tenía posibilidades de haberse convertido en presidente. Sin embargo, puede que ahora tenga bastante más apoyo que entonces dado el deterioro político de Barcina.

Corrupción como telón de fondo

En los últimos días, los elementos parecen haberse sumado en favor del corellano. La amenaza de Barcina perdió peso a raíz de la denuncia de Kontuz, puesto que la presidenta no está incluida en el proceso que se sigue contra Sanz y el exdirector de CAN, Enrique Goñi, debido a su condición de aforada, según ha reconocido la asociación de consumidores. Así pues, no puede prescindir de su condición de presidenta tan a la ligera.

El otro punto que fortalece a Catalán es el «caso Bárcenas». Uno de sus miedos era que, si forzaban la máquina para desbancar a Barcina, la corriente que esta lidera podría estar tentada en abandonar el partido.

Obviamente, la «escisión» a la que los medios han hecho referencia no pasa por la creación de un nuevo partido, sino por la marcha al PP de algunos de sus cuadros. Sin embargo, las últimas noticias de corrupción generalizada dentro del PP han hecho que ya no sea una formación tan apetecible.

En el caso de Barcina, con una denuncia por uso de información privilegiada en Fiscalía y otra esperándole por delitos societarios y prevaricación en el Juzgado número 3, el transfuguismo podría resultar políticamente letal. Ahora bien, si la presidenta se queda en minoría en UPN y en el Parlamento, tendrá que tomar decisiones.

FILTRADA A UNA WEB

La web «El Informador» fue la primera en sacar la filtración, lo que desató un aluvión de comentarios en las redes sociales y 0bligó a UPN confirmar la información al resto de medios.

La juez Benito, que lleva el «caso CAN», firma contra la corrupción

Los jueces decanos de todo el Estado se adhirieron ayer al acuerdo que formularon los jueces centrales de instrucción y en el que solicitaron más medios para poder investigar los asuntos relacionados con la corrupción y causas complejas con especial relevancia social. La juez María Paz Benito Osés, que es la decana de la Audiencia Provincial, es una de los firmantes de este manifiesto, y actualmente está llevando la investigación contra Miguel Sanz y Enrique Goñi tras la denuncia de Kontuz.

A este respecto, fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Nafarroa explicaron a GARA que Benito no firma este escrito porque carezca de medios para indagar lo acontecido dentro de Caja Navarra, sino que se une a la demanda en general.

La instrucción abierta contra Sanz y Goñi acaba de arrancar y, por ahora, la juez se ha limitado a solicitar una serie de documentos para corroborar la denuncia presentada por Kontuz, a la que ayer se adhirió UPyD como acusación particular. En otros casos de corrupción de peso en Nafarroa, lo que se ha hecho es solicitar un magistrado de «refuerzo» que ayude en la investigación. A.I.

Kontuz enviará como una prueba «irrefutable» de delito la comparecencia de Barcina

Horas antes de que estallara la pugna interna en UPN, Kontuz compareció ayer en el Parlamento para explicar los motivos de su denuncia sobre la CAN y para demandar la apertura de una comisión de investigación que depure las responsabilidades políticas. Pablo Ibáñez, portavoz jurídico de la asociación de consumidores, anunció que piensan trasladar a la juez María Paz Benito las últimas declaraciones de la presidenta Yolanda Barcina en la Cámara como prueba «irrefutable» de uno de los presuntos delitos que ahora se está investigando.

En concreto, Ibáñez hizo referencia al reconocimiento público por parte de Barcina de que cobró dietas por unas reuniones de las que no aparecen las actas y que tampoco firmó en ninguna parte. «Cuando se cobran unas dietas se responde de un trabajo. Ayer nos vino a decir la ilustrísima presidenta que había estado cobrando dietas sin asistir y sin firmar», aseguró Ibáñez. A juicio del abogado, esto puede ser una «prueba irrefutable» de que Barcina percibió unos emolumentos de forma irregular.

El cobro de dietas, así como la posible falsedad de las cuentas de la Caja, y la responsabilidad que ello conlleva para quienes, como Barcina o Miguel Sanz, ocuparon puestos en el consejo de administración, son dos de los delitos que están siendo investigados por el juzgado de Instrucción número 3 de Nafarroa. La juez Benito también indaga en posibles casos de «amiguismo» en algunas inversiones de la entidad y, en último término, la «prevaricación por omisión» en la que pudiera haber incurrido el Gobierno navarro al no realizar las inspecciones que le exigía la ley foral.

El tono de la comparecencia, en algunos momentos, fue agrio. Tanto Ibáñez como el portavoz de Kontuz, Patxi Zamora, enumeraron insultos y amenazas vertidas por líderes políticos de UPN y PSN. En concreto, se refirieron a Prudencio Induráin (UPN), que les llamó en prensa «sinvergüenzas». Asimismo, afirman que un líder del PSN ha expresado su deseo de que los miembros de Kontuz «acaben en el talego». También recordaron que UPN, Miguel Sanz, Enrique Goñi y el exconsejero Jesús Pejenaute les han amenazado con querellas y demandas. La única iniciativa real contra ellos es la de Pejenaute, que ya está archivada.

Estas afirmaciones enojaron a Carlos García Adanero –secretario general de UPN–, pues Ibáñez le atribuyó a él la amenaza de una querella. García Adanero negó tal cosa. El malentendido se solventó con un recorte de prensa, que aclaraba que fue UPN, a través de una nota de prensa sin firmar, quien prometió tomar iniciativas legales. Ibáñez pidió perdón, pero le recordó a García Adanero que él es el secretario general del partido y que, durante su intervención, se había atribuido ser la voz de UPN.

García Adanero, por su parte, contestó a Kontuz que no puede arrogarse representar a ninguna mayoría de navarros y, por ello, le emplazó a que, si quieren hacer política, concurran a unas elecciones. Ibáñez respondió asegurando que Kontuz nunca se va a presentar porque «no quiere ningún cargo», pero reivindicó el derecho a hacer política. «Si alguien piensa que los ciudadanos tienen que votar cada cuatro años e irse a su casa, está muy equivocado. Esto es un pobre concepto de la política de la democracia», proclamó.

Más allá de las peleas directas que se abrieron entre los representantes de Kontuz y los del partido gobernante, la mayoría de los dardos de la sesión de ayer recayeron sobre las espaldas del PSN, cuyo representante de la comisión era Juan José Lizarbe. «No entendemos por qué la comisión de investigación que es buena en Madrid no es buena para Navarra», dijo Zamora.

Lizarbe aseguró que, si la ronda de comparecencias en torno a la CAN les parece insatisfactoria, valorarán crear una comisión de investigación. Posiblemente la activación del proceso judicial haga al PSN modificar su actual posición contraria a indagar en el asunto. A este respecto, la clave está el próximo día 19, cuando acudirá a la Cámara Enrique Goñi, junto a varios de los altos cargos de su etapa. Entre quienes arroparán a Goñi se encuentran los exconsejeros José Antonio Asiáin (coprotagonista del famoso caso de Santiago Cervera), Luis Colina Lorda (director general de La Información) y José Antonio Sarría. A.I.

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