GARA > Idatzia > Kultura

Olivier van der Zee | documentalista

«'Encierro' quiere hacer partícipe al espectador de una explosión de adrenalina y emociones»

Después de fijar su interés en la crónica bélica acontecida en Orreaga -«778 La Chanson de Roland» («2011)- y descubrirnos el periplo visionario del empresario Horacio Echevarrieta en »El último magnate» (2012) -codirigido con José Antonio Hergueta-, Olivier van der Zee, ha filmado el documental «Encierro».

p042_f02.jpg

Koldo LANDALUZE | DONOSTIA

Los gestos, la tensión, el mugido de las bestias que se entremezcla con el griterío ensordecedor de los presentes en este ritual, han sido captados al detalle por una cámara que pretende acercanos al borde mismo de este frenesí que transforma las calles de Iruñea en un caudal humano sacudido por la presencia letal de los toros. El realizador de origen holandés y afincado en Euskal Herria, Olivier van der Zee, ha recurrido a la magia del cine y el 3D para compartir con el espectador una eclosión de emociones titulada «Encierro».

¿Cómo se produjo su primer contacto con los sanfermines?

Mi primer contacto fue desde la distancia. No alcanzaba a comprender lo que veía en el televisor. Resultaba imposible entender los porqués de aquellas miles de personas inmersas en un bullicio constante y, sobre todo, me sentí fascinado por la imagen de los toros recorriendo las calles y envueltos en una marea humana. No es fácil explicar estas emociones que albergué desde la distancia y mucho menos resulta explicarlas cuando, ya adulto, viví en primera persona aquel bullicio, aquella explosión festiva que tanto seduce al visitante de Iruñea. Ese primer contacto con los encierros fue desde el otro lado de una cámara, mientras lo captaba en el vallado y, de repente, vi cómo llegaba un toro desde Telefónica que llevaba atrapado en uno de sus cuernos el pañuelo de un corredor que, arrastrado por el suelo, se perdía en la distancia, casi hasta el coso. Fue una imagen muy fuerte, de esas que no se olvidan.

¿Cómo afrontó un proyecto de estas características?

Los encierros son algo muy enraizado en la cultura popular de este pueblo y quería ser testigo directo de este ritual con connotaciones casi mitológicas. Desde un principio me atrajo la idea de seguir de cerca el periplo de los corredores, quería saber sus motivos y quería captar esa emoción que se siente antes, durante y después de cada encierro. Además, todo ello quería que fuese descrito desde mi propio punto de vista, quería que fuera la mirada de un extranjero que tropieza con este escenario volcánico y cautivador para indagar, desde mi respeto más absoluto, en sus connotaciones más internas e intensas.

¿Qué pretende plasmar «Encierro»?

Pretende captar la sensación del corredor desde que se despierta por la mañana hasta justo después del encierro. Intenta explicar por qué corre. La cámara capta esas secuencias de tensión y miedo que alberga el corredor en los momentos previos de este ritual tan fascinante y todo ello cobra forma definitiva en cuanto se escucha el cohete y estalla esa explosión de adrenalina que apenas dura unos cuantos minutos. Son personas que se juegan la vida y, en esos instantes tan determinantes para ellos, incluso el más agnóstico, se transforma durante unos minutos en una persona creyente.

Esta opción de rodar en 3D, sigue la estela de los documentales de Werner Herzog («La cueva de los sueños olvidados») y Wim Wenders («Pina»).

Sí, es algo curioso y creo que este formato se amolda muy bien al género documental. No todos los proyectos merecen ser filmados en este formato pero, desde el comienzo, sentí que era obligatorio filmarlo de esta manera. Rodar en 3D es muy complicado porque grabas con dos cámaras simultáneamente y esas cámaras requieren tener una distancia entre ellas para asegurar la sensación tridimensional. Resultó muy difícil el rodaje porque era un escenario incontrolable y no podías estar seguro de que la secuencia pudiera funcionar. Hemos tenido la suerte de contar con una productora que lleva ya ocho años funcionando con este formato y ello aporta una gran seguridad y, sobre todo, ha aportado una gran calidad al proyecto.

Llevar a cabo este proyecto ha costado tres años.

Sí, desde el 2009 en que se rodaron las primeras imágenes de prueba y ya, el núcleo de todo el proyecto fue filmado durante el 2011 y el 2012. Lo más curioso de todo es que los corredores que participan en el documental siempre arrancan y corren en los mismos lugares y visten la misma ropa. Gracias a ello lográbamos tener una conexión, una continuidad, con lo grabado el día anterior o incluso al año siguiente y ello provoca la sensación de que todo parezca que está grabado en el encierro.

¿Podría señalarlos la secuencia más impactante?

Cuando fallece Daniel Jimeno en Telefónica. Es algo impactante y, al mismo tiempo muy emotivo porque el propio padre de Jimeno habla en el documental. Su testimonio es fundamental para lograr el sentido que quería dar a todo el conjunto.

¿Cual es la principal diferencia entre los encierros que se visionan en televisión y lo que observaremos en «Encierro»?

Varias cosas fundamentales. Por un lado, nuestro sentido cinematográfico capta mucho mejor los detalles y para ello hemos utilizado muy diversas cámaras y las hemos colocado en lugares en las que, hasta ahora, no habían sido ubicadas. Todo ello aporta una diferencia técnica indudable que ha adquirido una dimensión muy especial con las secuencias que hemos grabado con una cámara colgada de un cable y que, desde Mercaderes, recorría toda Estafeta. La cámara sobrevolaba todo ese recorrido y hemos atrapado imágenes que jamás se han visto. Desde la butaca, el espectador siente esa sensación de proximidad que se ve acrecentada con la labor que hemos desarrollado en el laboratorio y es que, como refuerzo a la banda sonora, hemos tenido que reconstruir, mediante pistas de sonido y grabando a toros reales en una finca, los mugidos y ruidos que producen estos animales y el sonido impactante que provocan cuando corren sobre el asfalto. Creo que técnicamente, estos son los elementos más espectaculares de todo el documental porque amplifica y acerca al espectador todos esos factores que jamás podrá vivir observándolas en directo desde el balcón, el vallado o a través del televisor. Gracias al tratamiento técnico de esas imágenes grabadas en alta resolución y mediatizadas por la velocidad, lo que transcurre en el tiempo real en tres segundos, nosotros lo prolongamos hasta casi los tres minutos. Ello permite que, además de sentir esa sensación de inmediatez, el espectador tiene tiempo de seguir al detalle cada uno de los gestos del corredor e intuye siempre presente la acechante silueta del toro.

«Aguardo impaciente el estreno en Iruñea»

«Finalizado el proyecto, siempre aguardas con impaciencia ver el trabajo en su conjunto. Es decir, verlo en su estado natural, en una gran pantalla. Después de revisarla infinidad de veces, la primera vez que la vi fue en el Festival de Málaga», explica Olivier van der Zee. Para él, un director trabaja para ello, para intentar plasmar todas tus inquietudes, y siempre aguarda espectante qué opinará el resto del público. «Es una sensación de nervios y, al mismo tiempo, de alegría -confiesa- porque estás compartiendo tu trabajo. Finalizada la película y mientras se sucedían los títulos de crédito, la gente comenzó a aplaudir y dirigió esa muestra de cariño hacia donde estábamos nosotros. Es difícil explicar lo que sientes en ese momento, saber que lo que has hecho ha gustado, es algo precioso».

A pesar de que la película ya esté estrenada en Málaga, van der Zee afirma que el filme no está del todo acabado. «Faltan algunos detalles técnicos que estamos puliendo ahora y vivido lo de Málaga, la que realmente será una piedra de toque fundamental será cuando `Encierro' se visione finalmente en Iruñea y en un pre-estreno que se celebrará el próximo día 27 [de mayo]». A esta cita acudirán los corredores que han participado en este proyecto, porque según el director «son las personas que han hecho posible esta realidad porque nos han abierto sus corazones, nos han mostrado sus emociones más íntimas. Aguardo con impaciencia ese momento y espero que la película goce con posterioridad de una buena distribución comercial». K.L.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo