El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, hizo ayer un llamamiento a los empresarios del país para que respalden el proceso de conversaciones de paz en La Habana con las FARC-EP.

«Hoy quiero dejarles un mensaje muy claro: la paz es de todos. La que buscamos no es la paz del Gobierno de Juan Manuel Santos, ni la paz del Estado, sino la paz para todos los colombianos, conseguida y defendida por todos», aseguró el mandatario durante la celebración de los 135 años de la Cámara de Comercio de Bogotá.

Según Santos, para cumplir este anhelo de paz, «necesitamos de su apoyo y de su confianza», manifestó dirigiéndose directamente a los empresarios.

El presidente explicó además que «en La Habana no estamos negociando el Estado, no estamos negociando nuestro sistema político, no estamos negociando nuestro modelo económico» sino buscando el fin del conflicto que desde hace más de medio siglo desangra al país.

«Estamos conversando, sí, sobre una agenda muy concreta y muy puntual que nos permita ponerle fin al conflicto», dijo.

«No se dejen confundir»

Santos pidió igualmente a los colombianos que «no se dejen confundir por las declaraciones que hacen las FARC» al margen de la mesa de negociaciones, «ni por las desinformaciones y mentiras de quienes se oponen al proceso», remarcó.

Recordó que, según el reciente informe del Centro Nacional de Memoria Histórica, han muerto más de 220.000 colombianos en el último medio siglo a causa del conflicto armado.

«Yo creo que es hora, yo creo que es tiempo de que hagamos lo que podemos hacer para detener este desangre y para que nuestros hijos conozcan una Colombia en paz, esa Colombia que no hemos conocido ninguno de nosotros», enfatizó el presidente colombiano.

Un día después de recibir el informe y atendiendo a las recomendaciones recogidas en él, Santos reconoció la responsabilidad del Estado en la comisión de graves vulneraciones de derechos humanos y prometió depurar responsabilidades.

Ya en el último año de su mandato presidencial, pidió «tranquilidad», pues todo los que se acuerde en Cuba con las FARC deberá ser refrendado por los colombianos. «Nada se negocia y nada se decide sin en el concurso de la nación», añadió.

El lunes, anunció de manera sorpresiva la renovación total de la cúpula militar y policial, con salidas significativas como la del general Sergio Mantilla, al parecer opuesto a los diálogos.