En marcha, la «revolución pacífica» de Evo Morales
LA PAZ
En una jornada que transcurrió con tranquilidad, los bolivianos eligieron ayer a los 255 miembros de la Asamblea Constituyente que se instalará el 6 de agosto próximo y dirimieron en qué departamentos se aplicará un régimen autonómico. Tras el cierre de casi todas los colegios electorales, después de ocho horas de votación, la Corte Nacional Electoral (CNE) reportó como único incidente una marcha de varios centenares de campesinos en la ciudad de Sucre, capital oficial del país.Los agricultores irrumpieron en la plaza principal de esa ciudad con una manifestación de protesta contra todos los partidos, porque no habían registrado a sus candidatos en sus listas, y la Policía usó gases lacrimógenos para dispersarlos. El jefe de la misión de observadores de la OEA, el colombiano Horacio Serpa, destacó el «civismo y entusiasmo» de los bolivianos. El presidente de la Corte Electoral, Salvador Romero, dijo poco antes de cerrarse la votación que esperaba una elevada participación. Estaban inscritos para votar 3,7 de los 9,4 millones de bolivianos.
Liberar recursos
Tal como lo hizo en diciembre pasado, cuando ganó las elecciones, el presidente boliviano, Evo Morales, votó en la localidad de Villa 14 de Septiembre, situada en el Chapare, la zona de cultivadores de coca que constituye su bastión político y sindical. Desde ese lugar, Morales ofreció una rueda de prensa en la que destacó que los dos procesos de votación realizados ayer permitirán una revolución «pacífica» y la recuperación de los recursos naturales, para fundar un nuevo «régimen económico».La Asamblea Constituyente «va a empezar, no solamente a liberar a los pueblos, sino a liberar también todos los recursos naturales», dijo Morales al remarcar que es partidario de que no se entreguen ni siquiera en concesión y mucho menos sean privatizados. El mandatario aimara ya nacionalizó los hidrocarburos el 1 de mayo pasado y ayer confirmó que el próximo 2 de agosto emprenderá «una revolución agraria» con su plan de distribución de tierras y eliminación de latifundios ociosos. Según Morales, la jornada de ayer también permite una «revolución democrática y pacífica» para evitar confrontaciones armadas internas, «como hay en países vecinos como Perú y Colombia».
La torpeza del ministro
Durante las horas de votación, Morales evitó pronunciarse sobre el régimen de autonomías departamentales, aunque durante la campaña lo criticó duramente, por considerar que se trata de una reforma alentada por las «oligarquías».Los líderes regionales del departamento oriental de Santa Cruz, la zona más prospera de Bolivia, se mostraron optimistas durante la jornada por un triunfo del «sí» en el referendo. Además del habitual cruce de acusaciones entre el oficialismo y la oposición, la jornada tuvo como anécdota curiosa el error cometido por el canciller, David Choquehuanca, al depositar en una misma urna los distintos votos para elegir constituyentes y respaldar o no las autonomías.
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