No ha competido desde junio, tiene muchas «ganas» y ha cambiado su preparación. Su objetivo es realizar un inicio fuerte de la temporada y centrarse después en el Tour. Tras los brillantes resultados del año pasado, su confianza se ha multiplicado, y con 29 años cree que ha llegado el momento de rendir al máximo.

La temporada ya ha comenzado. ¿Qué tal lleva su preparación?

He cambiado bastante la preparación, llevo menos kilómetros que otros años y he realizado un entrenamiento más intenso y más gimnasio. Con el paso de los años, el fondo está bastante trabajado. La verdad es que he descansado bastante y ahora mismo estoy un poco justo.

¿Por qué esos cambios?

Quiero coger más fuerza y musculatura, aunque es un trabajo que cuesta y que no me cunde demasiado, pero, a pesar de todo, sí que le he dedicado más tiempo. En cuanto hago un mes de bici enseguida pierdo toda la fuerza, es mi constitución, es algo que tengo que trabajar porque en temporada me quedo con muy poca musculatura y me hace falta más fuerza.

El año pasado, se dañó las dos rodillas y el codo. ¿Qué tal se encuentra de esas lesiones?

El hueso del codo me molesta algo todavía, y las rodillas van bien de momento.

Asimismo, apenas compitió 30 días. Me imagino que tendrá hambre de bicicleta.

Sí, tengo muchas ganas de empezar. Este año es muy importante. Sobre todo, después de lo conseguido el año pasado porque si no tengo lesiones he visto que tengo un nivel muy bueno. Ya tengo 29 años y por ganas y por ambición sí que quiero hacer grandes cosas. Por otro lado, después de tantos meses sin competir desconectas y se nota; por un lado, viene bien porque descansas, pero pierdes mucho hábito y trabajo, y cuesta arrancar.

Después de seis temporadas, ¿ya conoce su sitio en el pelotón?

Me considero y se me considera todavía un corredor un poco atípico. Con 29 años, no he corrido casi carreras de tres semanas, y sé que puedo disputar carreras de una semana, tras las sensaciones del año pasado en Suiza y la Euskal Bizikleta. Mi gran hándicap es la mala suerte, las caídas, porque cada vez que me caigo me rompo. Cuando estoy bien soy capaz de hacer cosas buenísimas.

Pero si empieza y no consigue ganar, ¿se agobiará?

Me lo tomaré con tranquilidad. El año pasado también empecé con problemas y, al final, en 30 días de competición, logré seis victorias y podía haber sido alguna más. No me gusta echarme flores ni no echarme, la carretera pone a cada uno en su sitio, pero, en porcentaje, fui uno de los corredores que más carreras ganó el año pasado.

¿Qué calendario va a disputar?

Vuelta a Murcia, Estella, Vuelta al País Vasco, Amorebieta, Flecha, Lieja, Romandía, descanso, Suiza, Tour y Vuelta. Según como termine el Tour, disputaría Alemania y Donostia.

¿Cuáles serán sus objetivos concretos?

Me gustaría centrarme mucho en el inicio de temporada, desde País Vasco a Lieja. Tengo ambición por ganar País Vasco, es una carrera que siempre me ha gustado, igual que la Euskal Bizikleta. Son carreras especiales. Sé que son objetivos muy difíciles y que poca gente puede tener al alcance de la mano, pero País Vasco, Lieja, Suiza y el Tour son los objetivos del año. También estoy con mucha ambición de hacer una carrera buena de tres semanas.

¿Qué meta tendrá en el Tour?

Nunca he disputado una carrera de tres semanas. Es una incógnita. Y por eso es un reto más. Claro que me gustaría hacer una buena general, pero si veo que no puedo intentaría ganar una etapa. Porque en una carrera así, el no irte de vacío es un gran éxito. Hay que ver cómo me adapto.

En su calendario no está el Tour de California. ¿No acudirá al túnel del viento esta temporada?

No está del todo descartado. En breve, Matxin me dirá si hay esa posibilidad de viajar a California. La verdad es que me gustaría ir, si no es ahora, antes del Tour por lo menos. Es una disciplina importante y el año pasado me quedé impresionado con mi cambio en las cronos. Trabajé con datos una posición y una postura, y hay una diferencia abismal.

Su equipo ha revelado su intención de ampliar su contrato hasta 2008. ¿Qué me puede decir?

Habíamos quedado para hablar en la concentración de Benidorm, pero al final no lo hicimos. En el equipo y, en especial con Matxin, estoy encantado. El año pasado disfruté mucho de la bici. La ambición es la ambición, pero también valoro mucho el estar a gusto en el equipo.

Comparte equipo con Mayo, Simoni, Millar, Gómez Marchante, Piepoli... ¿No son muchos gallos en un mismo corral?

No. El año pasado también se decía y Piepoli ganó dos etapas en el Giro y Simoni fue podio, Marchante ganó País Vasco y fue quinto en Vuelta, Millar venció una etapa de la Vuelta,... Yo creo que la plantilla está bien distribuida. Por ejemplo, Simoni es el líder del Giro y Mayo va a trabajar. El Tour sí que es una carrera que quizá necesita más gregarios que jefes de fila. Y a Simoni, Mayo o Millar prefiero tenerles a mi lado que no tenerles en mi contra.

La Operación Puerto se ha archivado, pero ha afectado a muchos corredores. Usted, en concreto, no pudo disputar la Vuelta.

La gente que ha montado toda esta historia ha demostrado el tipo de personas que son. No voy a dar nombres porque todos sabemos quiénes son. Han querido cubrirse de gloria con una historia que les ha superado y lo han hecho como el culo, muy mal.

¿Por qué dice eso?

De todo lo que hay, sólo sale lo que interesa que salga, y se sabe una cuarta parte de lo que realmente es. Hay cosas que son evidentes, se han encontrado ciertas cosas y contra eso no se puede decir que no. Existe, pero, joder, que saquen todo, no sólo una parte.

¿Entiende que el ciclismo está perseguido?

Sí, sí, se le está dando mucha caña al ciclismo. Cuando el río suena es que ha habido casos pero que salga todo. Es una vergüenza.