La Asamblea de Represaliados por la Okupación de Iruñerria y Askatasuna han denunciado el «montaje policial» que ha llevado al iruindarra Xabier Errea a la cárcel.

El joven se encuentra ya en la prisión de Iruñea después de que el sábado - precisamente, horas antes de la manifestación en denuncia de la «represión» contra el movimiento de ocupación- se personara voluntariamente y junto a su abogado ante la Audiencia Provincial.

Sobre Errea pesa una condena de 29 meses bajo la acusación de «atentado» a un agente de la Policía Municipal que, tal y como recuerda la Asamblea de Represaliados por la Okupación, «fue desmentida en el juicio por agentes de la misma Policía Municipal y por amigos de Xabi que aseguraron que se encontraba estudiando en la UPNA en el momento en que se produjeron los hechos».

Desde la Asamblea señalan, además, que no es el único caso y que otras once personas pueden correr la misma suerte.

«Agresiones policiales»

También critican que las denuncias por «agresiones policiales» no sigan adelante: «Las denuncias interpuestas por agresiones policiales como las de hace unos sábados en el Casco Viejo, o las más de 600 denuncias de los vecinos de Alde Zaharra a raíz del desalojo del gaztetxe Euskal Jai, se mueren de asco amontonadas en los juzgados a la espera de ser archivadas».

Askatasuna, por su parte, pone el acento en el comportamiento del juez Fermín Otamendi -que ha instruido tanto el caso de Errea como el de otros muchos jóvenes por casos relacionados con el de este primero- y los partidos políticos. Del primero dice que ha sabido «cerrar el camino represivo emprendido por el Ayuntamiento de Iruñea con el desalojo del Euskal Jai», y de los segundos, que prefieren «guardar silencio y mirar a las elecciones» antes que «dar solución a los problemas de los ciudadanos».