Fallece el anciano de Arrasate hospitalizado tras un sabotaje contra La Caixa
GARA |
El vecino de Arrasate Ambrosio Fernández hospitalizado tras el ataque contra la sucursal de la Caixa el pasado 6 de enero falleció el sábado en el hospital alaves de Txagorritxu.
Fernández, que tenía 79 años de edad y padecía con anterioridad numerosos problemas cardiorrespiratorios, fue uno de los cerca de 50 vecinos que fueron desalojados de sus viviendas después del importante incendio provocado por el ataque. Este vecino de Arrasate ingresó en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital gasteitzarra después de que la inhalación de humo hiciera empeorar su situación, ya de por sí complicada.
El comunicante anónimo que asumió este ataque el pasado 22 de enero pidió disculpas a los vecinos perjudicados, y aseguró que «los ciudadanos nunca han sido ni serán un objetivo».
A pesar de que la familia de Fernández ha pedido «tranquilidad» y no desea «ningún tipo de bronca», la muerte de este vecino de Arrasate ha sido motivo de rifirrafe entre los partidos políticos y las instituciones.
El Ministerio del Interior español solicitó ayer distintos informes forenses y policiales para determinar «con precisión» las circunstancias de la muerte de Ambrosio Fernández y determinar si es «víctima del terrorismo». El Ministerio que dirige Alfredo Pérez Rubalcaba afirmó que concederá esta condición sin esperar a que la familia reclame tal reconocimiento.
El líder del PSE en Gipuzkoa, Miguel Buen, aseguró que la violencia callejera «ha provocado la muerte de una persona» y emplazó a la izquierda abertzale a que «haga un llamamiento para que cese la kale borroka».
Concentración del PP
En opinión de la presidenta del PP en Gipuzkoa, María José Usandizaga, «la violencia callejera es terrorismo puro y duro», y afirmó que «toda esa actividad que algunos eufemísticamente denominan terrorismo de baja intensidad, no es otra cosa que terrorismo». En esta línea aseguró que en los últimos años ha habido «un incremento espectacular» al comprobar, a su juicio, «la debilidad de un Gobierno que ha cedido en demasiadas ocasiones y en demasiadas cuestiones».
Antton Karrera, coordinador de EB en Gipuzkoa, señaló que la «kale borroka no es una violencia menor y puede ser mortal» y consideró que es preciso que Batasuna «diga no» a este tipo de ataques porque «está obligada ética y políticamente».
Al hilo del fallecimiento del vecino de Arrasate, cincuenta representantes del PP se concentraron anoche en Donostia, y la Ertzaintza informó de que abrirá diligencias contra un edil del PP por no comunicar el acto.