El Consejo de los Organismos Sociales del Euskara, Kontseilua, y Udalbiltza ratificaron ayer el convenio de colaboración firmado por ambas partes en el año 2001. Este convenio tiene como objetivo desarrollar e incitar iniciativas en favor de los derechos lingüísticos de la ciudadanía.

Tal y como recordaron ayer Loren Arkotxa, presidente de la institución nacional, y Xabier Mendiguren, presidente de Kontseilua, la situación que viven los derechos lingüísticos en todo el territorio de Euskal Herria es «preocupante». Afirmaron que esos derechos son vulnerados en numerosas ocasiones. Mendiguren señaló que esta realidad fue la que llevó a Kontseilua a crear hace ya tres años el Observatorio de los Derechos Lingüísticos, Behatokia, ya que su función, según explicó, se basa en trabajar por los derechos lingüísticos tanto en el sector privado como en el público.

El presidente de Kontseilua agradeció la labor realizada por la institución nacional en pro del euskara y la apuesta hecha en favor del Observatorio de Derechos Lingüísticos, y dio a conocer su deseo de continuar trabajando conjuntamente. A su entender, el trabajo en común de los movimientos populares con las instituciones es «fundamental» para dar pasos eficaces hacia la normalización de esta lengua.

En opinión de Udalbiltza, Behatokia es una «pieza indispensable» para la normalización del euskara y el cumplimento de los derechos lingüísticos y es por ello por lo que ratificaron su voluntad y compromiso de seguir trabajando en esa dirección.

Agresiones y desprecios

El presidente de la institución nacional afirmó que el euskara «ha sido y sigue siendo víctima de agresiones y desprecios» por parte de las instituciones y recordó que la oficialidad del euskara no está reconocida en toda Euskal Herria. Arkotxa recordó que en Nafarroa los derechos de los euskaldunes cambian en función de la zona geográfica; en Lapurdi, Nafarroa Beherea y Zuberoa el euskara no está reconocido; y en Araba, Gipuzkoa y Bizkaia, como dijo Arkotxa, «aunque este reconocida por ley, en algunos ámbitos no ha tenido el desarrollo suficiente».

En opinión de Udalbiltza, la ciudadanía, así como las siguientes generaciones, «tienen todo el derecho a vivir en euskara» y es por ello por lo que la institución nacional ratificó la necesidad de seguir trabajando en este sentido.

Arkotxa recordó que la labor de la Asamblea de Ayuntamientos y Electos de Euskal Herria se basa en incentivar la construcción nacional de Euskal Herria «como un proceso dinámico y democrático que tiene como fundamento la libre participación y la capacidad de decisión de la ciudadanía vasca». En esta misma línea, trajo a colación los convenios de colaboración firmados con diversos agentes del país, como el Consejo de la Juventud de Euskal Herria o la editorial Nabarreria.