Quienes firmamos este manifiesto queremos sumarnos a la denuncia del juicio político que está llevando a cabo la Audiencia Nacional en lo que se conoce como el sumario 18/98.

La consideración del mismo como juicio político no es una frivolidad. Se basa en la existencia fehaciente de graves vulneraciones de los derechos fundamentales de expresión, reunión o asociación. Entre las agresiones percibidas destacan la privación de garantías jurídicas de las personas procesadas; las fianzas económicas desmesuradas; el abuso de la prisión preventiva; las reiteradas denuncias de torturas y malos tratos; la instrumentalización política de la legislación; o la aplicación expan- siva de tipos delictivos indeterminados y procedimientos ideologizados basados en documentos literario-policiales sin valor probatorio alguno.

Este caso no hace sino afirmar nuestra crítica a este «Estado de Derecho». No nos convence, además, ni por la supuesta independencia de un poder judicial cuya cúpula responde a determinados intereses políticos; ni por la sórdida existencia de tribunales de orden público excepcionales como la Audiencia Nacional; ni por su forma de Estado monárquica y negadora de la plurinacionalidad... A lo que debemos sumarle este claro intento de criminalización o colectivización delictiva, que obvia el carácter individual y probatorio del delito así como la presunción de inocencia.

Por eso nos sumamos a la manifestación de este sábado en Bilbao. No compartimos todos los planteamientos políticos de quienes se sientan en el banquillo, pero nos vemos en la obligación de defender sus derechos, porque son los nuestros.

Mostramos nuestro total convencimiento de que el diálogo, la no-violencia y el respeto a todos los derechos de todas las personas nos llevarán a una Euskal Herria más libre y democrática.