A grandes males, grandes remedios. La «reflexión» realizada durante el parón liguero tuvo consecuencias positivas en un Athletic que mostró bastante más garra que en partidos anteriores y fue capaz de marcar cuatro goles, pero también las tuvo rotundamente negativas, con cinco goles encajados en apenas 45 minutos.

La nueva reflexión, esta vez a cargo exlusivo de Mané, puede traducirse en una pequeña revolución de cara al encuentro frente al Valencia. De hecho, y junto a los dos cambios obligados por las ausencias de Fernando Amorebieta y Ander Murillo, el técnico vizcaino puede introducir otros dos, un tanto sorprendentes, y cambiar incluso el dibujo del equipo.

Eso se desprende, al menos, del ensayo realizado ayer por los rojiblancos, según el que Josu Sarriegi podría regresar al centro de la defensa. Algo evidente, teniendo en cuenta que ha jugado habitualmente y que Amorebieta, además, deberá cumplir un encuentro de sanción. Tampoco parece especialmente significativa el regreso a la alineación de Aritz Aduriz como jugador más adelantado, pese a lo que empeoró el equipo en Santander tras la sustitución de Isma Urzaiz.

Las sorpresas comienzan a partir de ahí, con el jugador elegido para sustituir a Ander Murillo que, por lo visto ayer, podría ser Ustaritz. Nunca ha jugado en el centro del campo, pero también se trata de una de las posiciones en las que menos opciones maneja el técnico, con Gurpegi, Orbaiz y Tiko en el dique seco.

La última novedad, y gran sorpresa, llegaría de la mano de Javi Casas, que puede sustituir a Javi González en el lateral zurdo. Desde que se le hiciera la ficha durante el invierno, Javi González apenas sí se ha perdido los partidos de los que le han apartado las lesiones y Mané, de hecho, llegó a catalogarle de jugador «importante», pero lo cierto es que el sábado puede perder su puesto en el once.

Además, todo parece indicar que Mané apostará por el 4-3-3 como sistema.

Uno de los beneficiados por la revolución, Ustaritz, reconocía ayer que su entrada en el centro del campo le supondría jugar en «una posición nueva, pero ya llevo algún dia entrenando y me encuentro bien». De todas formas, recordó que Mané «todavía está probando cosas» y tiene tiempo para más ensayos de aquí al sábado.

Descartada la rotura

Ander Murillo se sometió ayer a una resonancia que descartó rotura alguna, pero que detectó una importante sobrecarga en el cuádriceps derecho. No se han marcado plazos, pero está descartado para el sábado.