La madrugada del jueves y el viernes por la mañana desconocidos atacaron la sede que el PSE tiene en Barakaldo y un cajero exterior del Banco de Vasconia en Iruñea. Poco antes de la madrugada se lanzaron tres cócteles molotov contra las oficinas del PSOE situadas en la calle La Paz de Barakaldo, estallando dos de ellos sin que se produjeran daños físicos ni desperfectos importantes. Los bomberos apagaron las llamas.

El secretario general del PSE en Bizkaia, José Antonio Pastor, situó el ataque dentro de «una nueva etapa» y consideró que se trata de «un intento de intimidar o coaccionar la voluntad de los socialistas vascos de cara a estas elecciones». Añadió que «en ningún caso van a conseguir modificar la actitud de los socialistas vascos».

Pastor condenó este «enésimo ataque» advirtiendo que de este modo «no condicionarán la decisión del Gobierno o de los tribunales sobre la legalización o no de plataformas electorales» y recordó que seguirán siendo «respetuosos en la exigencia del cumplimiento estricto de la legalidad vigente». El secretario general de Bizkaia mencionó incluso a Arnaldo Otegi afirmando que «el rebrote de la kale borroka pone en evidencia la poca sinceridad y credibilidad de Otegi cuando habla de compromiso por la vías políticas y democráticas». Emplazó una vez más a la izquierda abertzale apuntando que se trata de «nueva oportunidad para rechazar esas actuaciones, incompatibles con un escenario de diálogo».

PP, Ibarretxe y Aralar

El presidente del PP de Bizkaia Antonio Basagoiti condenó el ataque y expresó su solidaridad a los familiares y militantes de PSE. También hizo mención a Batasuna, opinando que este tipo de actuaciones «los ilegitima para tomar parte en el juego democrático, y para pensar en estar en las siguientes elecciones».

El lehendakari, Juan José Ibarretxe. en unas declaraciones ante los medios el viernes en Balmaseda, también tuvo en cuenta estos ataques. Señaló que «siempre que hay cualquier tipo de actividad violenta eso en sí mismo es negativo» y afirmó que «el futuro hay que construirlo con la política, no se puede construir con violencia».

Aralar también mostró «su repulsa» a los ataques realizados estos días en Lekeitio y Barakaldo y denunció que «este tipo de actuaciones no aportan ningún argumento positivo; ni al proceso de diálogo entre partidos ni al proceso de normalización política». El vicecoordinador del partido, Jon Abril, se refirió incluso al Aberri Eguna que tendrá lugar hoy como ejemplo de unidad, y opinó que estas actuaciones dan «argumentos huecos a los que quieren ir en contra de los abertzales».

El ataque de Nafarroa

En Iruñea el ataque tuvo lugar sobre las 6.00. Desconocidos lanzaron botellas incendiarias contra un cajero exterior de una sucursal del Banco de Vasconia situada en la calle Eskirotz, en el barrio de Iturrama. Al igual que en Barakaldo, los daños no fueron importantes.

La Policía española analizó los restos de las botellas y también ha recabado testimonios de los vecinos de la zona tratando de identificar a los autores, según informó la delegación del Gobierno español. El Gobierno de Nafarroa condenó el ataque.