El líder de la organización chiíta Hizbula, el jeque Hassan Nasrallah manifestó ayer que la única salida a la crisis política que vive Líbano desde noviembre de 2006 y que lejos de cerrarse parece haberse agravado, pasa por la convocatoria de elecciones legislativas anticipadas o de un referéndum. Nasrallah hizo estas declaraciones durante su intervención en la ceremonia anual de graduación de los estudiantes recién licenciados en una universidad de Hizbula, en el sur de Beirut.

Además, aseguró que las milicias del movimiento que lidera no entregarán sus armas hasta que se demuestre que existe un Ejército libanés capaz de hacer frente y responder a los ataques israelíes, en respuesta a unas declaraciones de la mayoría antisiria del Parlamento, que le solicitó el desarme total de las milicias de Hizbula en cumpli- miento de la resolución de Naciones unidas que puso fin a la guerra del pasado verano contra Israel.

Nasrallah rechazó tal posibilidad, argumentando como única solución la creación de «un Estado fuerte con un Ejército fuerte, capaz de enfrentarse a cualquier tipo de agresión israelí en Líbano».

«El último diálogo bilateral ha llegado a un punto muerto», afirmó Nasrallah, «y cuando se llega a un bloqueo, la única lógica es dirigirse a los que son fuente de poder en nuestro país, el pueblo, en vez de recurrir al mundo exterior -en referencia a los países árabes y occidentales que apoyan al actual Gobierno de Fouad Siniora-, parte del conflicto, y partidista» en su orientación política.

«Hay dos fórmulas democráticas en el mundo: un referéndum público, o elecciones anticipadas», apuntó.