El primer ministro británico, Tony Blair, concretará «la próxima semana» sus planes de retirada del Gobierno, según adelantó ayer en declaraciones a la cadena GMTV.

«Dejaré clara mi posición la semana que viene», aseguró el líder laborista en una entrevista con motivo del décimo aniversario de su primera victoria electoral, el 1 de mayo de 1997.

Blair, que ya dijo hace unos meses que no estaría en el poder para el próximo congreso del Partido Laborista, en setiembre, debe dar la fecha exacta de su partida para que pueda empezar el proceso interno de elección de su sucesor.

Se espera que el anuncio de Blair se produzca el 9 ó 10 de mayo, después de que se celebren mañana las elecciones municipales y autonómicas en Inglaterra, Escocia y Gales y de que el próximo 8 de mayo se restaure la autonomía del norte de Irlanda.

A partir de que Blair precise el día de su marcha, comenzará un proceso electoral de siete semanas en el seno del Partido Laborista, que concluirá a finales de junio.

Candidaturas

La primera semana estará dedicada a la presentación de las candidaturas, durante las tres siguientes se celebrará la campaña, se invertirán dos semanas más en la votación -en la que participarán diputados laboristas, militantes y afiliados a los sindicatos-, y en la séptima se darán a conocer los elegidos.

El ministro de Finanzas, Gordon Brown, es el favorito para sustituir a Blair como líder del partido y jefe del Gobierno, aunque podría tener que enfrentarse a dos candidatos del ala izquierda del partido, John McDonnell y Mi-chael Meacher, si finalmente pueden reunir las 45 firmas de parlamentarios necesarias.

Por otra parte, según un sondeo del diario «The Independent», casi siete de cada diez británicos considera que Blair será recordado sobre todo por la guerra de Irak.