Seis muertos, 16 heridos y varias personas desparecidas es el balance provisional del derrumbe a causa de un escape de gas de un edificio de cinco plantas en Palencia. Las víctimas identificadas hasta el momento son seis mujeres de edades comprendidas entre los 20 y 91 años.

Esta es la explosión de gas más grave ocurrida en lo que va de año. En la última década, contando con la de ayer, han muerto 70 personas a consecuencia de 32 explosiones de distintos tipos de gas.

El inmueble, de unos 30 años de antigüedad, estaba situado en el número 4 de la calle Gaspar Arroyo de Palencia, una céntrica vía próxima a la Catedral de Pamplona.

La explosión, que se produjo poco antes de las 6.00, causó heridas de diversa consideración a 16 personas, de las cuales ayer sólo 8 permanecían ingresadas; 6 en el Hospital Río Carrión de la capital palentina y una en el Provincial de San Telmo, según informó el consejero de Sanidad de Castilla y León, César Antón. Además, una niña de 6 años tuvo que ser evacuada en helicóptero hasta el complejo hospitalario de Salamanca debido a la gravedad de sus estado. Ayer permanecía estable y sedada en la Unidad de Cuidados Intensivos.

Otros 12 heridos fueron trasladados en ambulancia a urgencias de un centro de salud y 6 fueron atendidos en el hospital de campaña instalado en la zona.

Tras el derrumbe total del edificio, se desató un incendio que tardó varias horas en ser sofocado. En un primer momento, el servicio de emergencias de Castilla y León y los bomberos de Palencia, apoyados por una unidad canina, rescataron tres cadáveres. Poco después de las 15.00, fue hallado el cuarto cuerpo en el edificio colindante, mientras se procedía a su derribo ante el riesgo de derrumbe. Una hora más tarde, los servicios de rescate hallaron entre los escombros del edificio siniestrado los cadáveres de dos hermanas que dormían en la misma habitación.

Cerca de 200 desalojados

Ante el riesgo que corrían los miembros del equipo de rescate y los perros rastreadores a causa del calor generado por los rescoldos del fuego, las labores de búsqueda entre los escombros se detuvieron durante un tiempo, centrándose en solventar la amenaza de derrumbe del inmueble contiguo.

Debido a la gravedad de la situación, alrededor de 200 vecinos fueron desalojados de varias viviendas cercanas.

El Ayuntamiento de Palencia, en colaboración con la Junta de Castilla y León, puso en marcha un operativo para realojar a los afectados en hoteles y otro tipo de plazas residenciales, mientras el Banco de Alimentos suministró vituallas.