Casi un centenar de antimilitaristas participaron ayer en la 17ª edición de la Marcha al Cuartel de Soietxe. Antes de proceder a la tradicional plantación de puerros en la citada instalación ocupada por el Ejército español, los marchistas simularon un velatorio «por la muerte de la vocación militar».

La llamativa parodia se desarrolló una vez de que los marchistas, convocados por los grupos antimilitaristas de Bizkaia, realizaran a pie el trayecto entre el centro de Mungia y el cuartel, coreando eslóganes antimilitaristas en favor del cierre de las instalaciones militares y por la abolición de los ejércitos. Ya en la instalación militar de Soietxe, se produjo el «entierro» de la vocación militar, en el que no faltaron el coche fúnebre, la lápida, el ataud y las plañideras, trío de las Azores incluido.

Luego, los participantes plantaron puerros en las inmediaciones del cuartel, en reivindicación de la recuperación de los terrenos militares para usos civiles, tal y como se ha venido realizando en los últimos años. Hubo posteriormente una alubiada popular en Mungia.

Con la marcha a Soietxe los convocantes pretenden «exigir la desaparición de esta instalación militar y reivindicar la utilización social de los terrenos que ocupa. El cuartel de Soietxe es la instalación militar más grande de Bizkaia y desde que Franco expropió las huertas que allí había para construir el cuartel -añaden en una nota de prensa- hemos reivindicado la recuperación de ese terreno de cultivo». La marcha se repite siempre bajo el lema ``Bota Koartelie eta erein porrue''.

Según los antimilitaristas, «las instalaciones militares no aportan nada -al menos, nada bueno- a la sociedad civil. Los acontecimientos internacionales de los últimos años no dejan lugar a dudas: el papel de los ejércitos es defender los intereses geoestratégicos y económicos de los gobiernos del Norte y sus socios del Sur para mantener un sistema que condena a más del 80% de la población mundial a vivir en la miseria».