Cientos de personas participaron ayer por la mañana en dos marchas montañeras organizadas para conocer las verdaderas consecuencias de la incineración en nuestro entorno y mostrar su oposición a las infraestructuras proyectadas en Zu- bieta y Pagasarri.

Por un lado, numerosas personas se reunieron, respondiendo a la convocatoria de Ekologistak Martxan y Alonsotegi Bizirik, en la plaza bilbaina de Zabalburu para salir hacia Pagasarri, paraje donde la Diputación vizcaina prevé construir un segundo horno de incineración de residuos. El objetivo de la misma, según señalaron desde el colectivo Ekologistak Martxan, fue el de «dar a conocer el impacto del tratamiento de basuras en nuestro entorno, las propuestas de futuro de la Diputación de Bizkaia y las alternativas, realmente sostenibles, que se pueden establecer». Para ello, la marcha visitó tanto la incineradora actual de Zabalgarbi como las instalaciones del vertedero de Artigas.

El grupo ecologista recuerda que hoy día allí se incinera el 33% de la basura de Bizkaia, y que con el nuevo horno se prevé doblar ese porcentaje, lo que en su opinión, además de crear 23.000 toneladas de «peligrosos» residuos tóxicos, «debilitará de manera sustancial» los esfuerzos que se realizan tanto en el reciclaje como en la minimización de las basuras.

Por otra parte, fueron alrededor de 200 las personas que realizaron la marcha a Artzabaleta, emplazamiento donde está previsto que se construya la incineradora de Gipuzkoa. En la marcha, convocada por las plata- formas Lasarte-Oria Bizirik, Usurbil Bizirik y Zubieta Lantzen, hubo dos cadenas que partieron desde Lasarte y Usurbil y que se reunieron en Artzabaleta. Una vez allí, miembros de Zubieta Lantzen denunciaron la «hipocresía» de algunos partidos con este tema, y confiaron en que eso les pase factura en las próximas elecciones.