Homenaje al creador de tintín y pionero del cómic moderno en europa
Bélgica acoge multitud de actos para conmemorar el centenario del nacimiento de Georges Remi, Hergé, el creador de Tintín, uno de los personajes más conocidos del cómic europeo. A pesar de que Tintín dejó de viajar en 1983, cuando murió Hergé, cada año dos millones de personas más se enganchan a las aventuras del intrépido reportero.
Georges Remi, Hergé, el creador de Tintín, cumplirá 100 años el próximo lunes y Bélgica, su país natal y edén europeo de las historietas ilustradas, ya lo tiene todo preparado para homenajear al autor de uno de los personajes más célebres del siglo XX.
Hergé (Bruselas, 1907-Lovaina 1983) publicó en 1929 por primera vez las aventuras de Tintín, de las que se han vendido alrededor de 250 millones de ejemplares traducidos a más de 50 idiomas. Y a pesar de su antigüedad, las aventuras de Tintín no corren el riesgo de quedar relegadas al olvido, ya que cuentan con una base de seguidores en el mundo que aumenta cada año en dos millones de nuevos lectores.
Un museo sobre la obra de Hergé, billetes y sellos conmemorativos, murales decorando trenes y estaciones, exposiciones e, incluso, un espectáculo musical, son sólo algunos de los «regalos» que recibirá a título póstumo el creador del reportero de cómic más popular de Europa.
El próximo día 21, la viuda de Hergé, Fanny Rodwell, pondrá la primera piedra del museo Hergé, que abrirá sus puertas en 2009. Este museo, diseñado por el arquitecto Christian de Portzamparc, se ubicará en el campus de la Universidad de Lovaina, localidad belga donde falleció el autor.
La casa de la moneda de Bélgica emitirá una moneda de 20 euros con la efigie de Hergé, mientras que el servicio de correos belga hará lo propio con una serie especial de sellos de 25 unidades.
Bruselas, ciudad de donde parte Tintín hacia el resto del mundo en sus aventuras gráficas, según deducen los expertos del primer libro «Tintín en el país de los Soviets», acoge una exposición sobre la obra del artista «Hergé, del viaje imaginario al viaje interior» y una muestra fotográfica que lleva el título de «100 fotos para un centenario».
La estación sur de Bruselas ha sido decorada con un fresco en blanco y negro con una imagen de «Tintín en América» en la que se aprecia al personaje vestido de vaquero sentado sobre una locomotora.
Igualmente, se han restaurado los frescos de la estación Stockel del metro de la capital belga, también decorada con imágenes del protagonista del flequillo rubio. Además, un tren de Alta velocidad Thalys, que une Bruselas con París, ha incluido un dibujo con un Tintín sonriente con su habitual gabardina, acompañado por su fiel perro Milú.
El museo del cómic de Bruselas, expone en su «Espacio Hergé» los sellos conmemorativos por el centenario del autor que pondrá a la venta el servicio de Correos belga.
Por su parte, en Ostende, al noroeste de Bélgica, se puede ver una versión musical en holandés de Tintín, espectáculo que también se podrá disfrutar en Amsterdam.
También habrá homenajes fuera de Bélgica. En Euskal Herria, el Kutxaespacio de Donostia albergará hasta el verano la exposición «100 años de ciencia con Tintín». Veinticinco paneles, en euskara y castellano, ilustrarán a través del personaje de cómic algunos descubrimientos, experimentos o fenómenos naturales relacionados con la ciencia y la tecnología.
En Barcelona se centrarán en una de las grandes pasiones del autor belga: los automóviles. Así, del 9 al 17 de junio, podrá visitarse en el Salón del Automóvil «Tintín y los coches», muestra que exhibe 23 vehículos aparecidos en sus historietas.
Además, los estudios DreamWorks han confirmado que Steven Spielberg plasmará el popular personaje de cómics en una trilogía de películas de animación por ordenador. Spielberg dirigirá una de las películas y el neozelandés Peter Jackson, director de la trilogía de «El Señor de los Anillos», se encargará de otra. En las tres películas, el personaje de Hergé y su universo estará recreado por animación generada por ordenador y se utilizarán técnicas de captura de movimiento similares a las empleadas en «Polar Express» o «Monster House».
Spielberg es uno de los enamorados del universo Hergé y durante 25 años ha intentado conseguir unos derechos que finalmente obtuvo el pasado año.
Los estudios WETA Digital, encargados de los efectos especiales de «El Señor de los Anillos», han realizado ya unos 20 minutos de prueba con este personaje. «Los personajes de Hergé se ven como seres reales capaces de expresar emociones y un alma que va más allá de todo lo visto hasta ahora en el campo de la animación», declaró Spielberg. «Queremos que las aventuras de Tintín tengan el realismo de una película real, aunque Peter y yo creemos que filmarla en un formato tradicional no haría honor a la apariencia característica de los personajes y el mundo que Hergé creó», añadió.
De los 23 títulos que componen las aventuras de Tintín que Hergé creó entre 1929 y 1976, los dos directores aún no han anunciado cuales llevarán a la pantalla aunque al parecer están seleccionadas.
Tintín es un periodista que recorre el mundo y vive fantásticas aventuras. Es buena persona, valiente y amigo de sus amigos. Hergé creó a numerosos personajes que acompañan a Tintín en sus peripecias, casi todos ellos masculinos. Su perro y fiel amigo Milú es el más cercano, pero también están el capitán Haddock, un veterano capitán de la marina; Silvestre Tornasol, un sabio despistado pero con un carácter imprevisible; los detectives Hernández y Fernández, que aunque no son gemelos sólo se les distingue por la forma de sus bigotes; Néstor, el paciente y cortés mayordomo; el general Alcázar, fumador emperdernido y aficionado al ajedrez; y Tchang, el primer amigo humano de Tintín. Este personaje está basado en su amigo real Tchang Tchong-Jen, un estudiante chino de Bellas Artes en la Universidad de Lovaina, quien le introduce en la historia y cultura china.
También están los «malos», como el millonario Roberto Rastapoulos; su cómplice Allan Thompson, contrabandista en el Mar Rojo; el doctor J.W. Müller, jefe de una banda de falsificadores de dinero; y el coronel Sponz, jefe de Policía. La única mujer relevante del universo de Hergé está encarnada en Bianca Castafiore, una cantante de ópera en la que la modestia brilla por su ausencia.
La primera historieta del reportero del copete vio la luz en Bélgica en 1929, bajo el título «Tintín en el País de los Soviets». Al ver la repercusión que sus obras alcanzaron en los años 30, Hergé decidió documentarse mejor para ambientar las aventuras alrededor del mundo de su personaje, «más allá de las ideas preconcebidas generalizadas sobre otros países», según afirmó Concepción Zendrera, que lleva traduciendo al castellano las obras de Tintín desde los años 50.
Hergé, al contrario que su intrépido personaje, no fue un gran viajero. Para recrear destinos como Congo o India, recurrió a revistas, libros de viajes y a testimonios personales, como su amigo Tchang, que le ayudó en la ambientación de las aventuras de Tintín en China en «El loto azul», y que dio nombre a uno de sus personajes más entrañables, que protagonizó «Tintín en el Tíbet».
Esta intensa búsqueda de la perfección en los detalles de la trama se complementa con una técnica de trazo limpio y firme, donde no cambian ni tramas ni sombras, y, asimismo, por unos decorados muy elaborados. Todo esto ha valido al belga Hergé que le consideren el precursor del cómic moderno en Europa.
George Remi empieza a dibujar con siete años. En 1921, se incorpora a los Boy-scouts y empieza a publicar historietas en la revista «Le Boy-scouts», donde firma por primera vez con el seudónimo de Hergé (las iniciales de su nombre invertidas). En 1925 entra en el departamento de suscripciones del diario «Le Vingtième Siècle», pero es en «Le Boy-scouts Belge» donde publica su primera serie: «Totor, jefe de patrulla de los Abejorros», donde ya se perfila Tintín. En 1928 crea el suplemento juvenil -«Le Petit Vingtième», donde aparecen los tres primeros álbumes de Tintín: «Tintín y los soviets», «Tintín en el Congo» y «Tintín en América».
Entre 1934 y 1940, Ediciones Caster man publica las aventuras del intrépido periodista. En 1936, Hergé crea una nueva serie: “Las aventuras de Jo, Zette y Jocko” para el semanario francés “Coeurs Vaillants”. Su incipiente carrera queda truncada por la invasión alemana de Bélgica, ya que desaparece “Le Vingtième Siècle”. Hergé entra como redactor jefe en el suplemento juvenil “Soir Jeunesse”, del periódico “Le Soir”. Hergé tiene un parón de dos años tras la liberación de Bélgica en 1944, ya que el mando aliado aparta de su trabajo a todos los periodistas que han trabajado durante la ocupación. En 1946 resurge con el semanario “Tintín” y en 1950 se crea “Estudios Herge”. Tras pasar por una crisis personal, en los 60 se lleva al cine “El Toisón de Oro” y “Tintín y las naranjas azules”.
A partir de entonces, la carrera de Hergé despega y recibe varios premios. La última aventura del reportero, “Tintín y el arte Alfa”, quedó inacabada al morir su creador. Siguiendo sus instrucciones, se publicó inconclusa. GARA