El Consejo de Administración de la Real Sociedad anunció ayer su decisión de convocar una Junta Extraordinaria el sábado 30 de junio a las once de la mañana en el Kursaal, en la que se someterá a una moción de confianza. Así, tras el informe del presidente, se pedirá la ratificación del Consejo en el segundo punto del orden del día y, sólo en el caso de que la mayoría de las acciones presentes y representadas rechacen la continuidad de la dirección, se procederá en el tercero a elegir en esa misma cita entre aquellos candidatos que se presenten para sustituirla.

Miguel Fuentes explicó que «creemos que ha llegado el momento de dar la palabra a los accionistas. Todavía no conocemos cual será la situación del equipo la próxima temporada, pero en ejercicio de nuestra responsabilidad como Consejo hemos tomado la decisión de convocar esta Junta sin más dilación. Este Consejo fue elegido el 30 de junio del 2005 para cinco años y nuestro compromiso y responsabilidad con la Real nos lleva a someternos a la voluntad de los accionistas. A ellos nos debemos y ellos deben tomar la decisión sobre este Consejo. Si sigue respaldado por una mayoría seguiremos trabajando por y para la Real y en caso contrario habrá un relevo».

«Dimitir sería lo fácil»

Se mostró optimista sobre la posibilidad de que el accionista confíe en el Consejo y sobre la petición de dimisión realizada por APARS dijo que «el descenso no se ha producido y vamos a seguir peleando sabiendo lo difícil que está. Nosotros no vamos a bajar los brazos. Si eso se produce o no, los accionistas deben decidir. Lo fácil sería irnos, pero no sería justo ni con la Real ni con los accionistas».

No descartó que haya cambios en el órgano directivo dentro de una renovación que incluiría la contratación de un director deportivo y mostró su disposición a tomar decisiones hasta el 30 de junio con normalidad.

Preguntado por la decisión que se va a tomar con Lotina dijo que «éste no es el momento de hablar de situaciones puntuales. Lo más importante es mantenernos en Primera y, en ese caso, el contrato está renovado automáticamente. Si no, nosotros estamos contentos con su trabajo y vamos a tomar las decisiones que entendamos que sean las mejores para la Real».

El momento de anunciarlo

Sorprende que la convocatoria se hiciera pública ayer un día después de que un editorial del DV exigiera esa decisión que el Consejo dijo que no iba a hacer pública hasta que no se conociera en que categoría iba a jugar la Real. Tanto María de la Peña como Miguel Fuentes quisieron aparentar que ni la derrota de Iruñea ni ese editorial tuvieron efectos en la decisión. Para explicar el momento de anunciarla señalaron que «no queríamos que las decisiones que tomáramos pudieran interferir en la marcha deportiva del equipo. Ahora la situación es complicada, pero para poder realizar esta Junta el 30 de junio necesitamos un mes de plazo. Queremos seguir centrándonos en las posibilidades del equipo y procurar que nada interfiera en la marcha del equipo y apurar todas las posibilidades que tiene».

Sobre las acciones que controla el entorno del Consejo después de la ampliación de capital, Miguel Fuentes señaló que «hemos hablado demasiado del control de las acciones, cuando es el club de fútbol con las acciones más repartidas y esta entidad no la puede controlar nadie. Está en manos de los pequeños accionistas y el que tenga alguna preocupación tiene el libro de accionistas en el club».

Sobre lo sucedido en Iruñea, evitó realizar cualquier comentario sobre todo lo extraño que rodeó el partido, pero sorprendió la respuesta que dio cuando se le preguntó si era verdad, tal como alguien ha afirmado, que desde Osasuna se propuso el empate y la Real rechazó el pacto porque quería ganar. «No sé quién ha dicho eso», respondió.