GARA > Idatzia > Ikusmira

No existen derechos humanos si hay ocupación

La Guerra de Junio de 1967 enfrentó al Ejército del joven estado de Israel con una coalición de países árabes encabezada por Egipto e integrada por Siria, Irak y Jordania. El resultado de la contienda bélica fue la ocupación por Israel de la estratégica Península de Sinaí, los Altos del Golán y los territorios de Gaza y Cisjordania.

Tras la restitución a Egipto del Sinaí, Siria todavía no ha logrado la devolución de los Altos del Golán, claves como reserva acuífera, y, por descontado, los palestinos sorportan una ocupación que se salda con miles de víctimas cada año. El cuarenta aniversario de la Guerra de los Seis Días sólo puede servir como referente cara al logro de una solución en la región, y así se recoge en el último plan de paz árabe, patrocinado por Arabia Saudí, en el que se reclama la vuelta de Israel a la demarcación fronteriza anterior al 67. Para los palestinos, el regreso de los miles de refugiados causados por esa primigenia ocupación es una reclamación inexcusable. En este sentido, es del todo oportuna la crítica de AI a la represión israelí y a una comunidad internacional que en cuatro décadas no ha buscado un cauce de solución a la cuestión palestina. Y es lógico también abogar por el respeto a los derechos humanos. Eso sí, sin olvidar nunca que ocupante y ocupado no son iguales, tampoco en ese plano.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo