Jáuregui pide quitar alcaldías a ANV y EB tampoco le cederá sus cargos
A una semana de la constitución de los ayuntamientos vascos, el portavoz del PSOE en la Comisión Constitucional del Congreso español, Ramón Jáuregui, apostó por evitar, mediante el acuerdo con el resto de los grupos políticos municipales, que ANV se haga con las alcaldías en las localidades donde ha sido la fuerza más votada. Además, Ezker Batua adelantó que tampoco cederá los cargos electos que le han sido asignados gracias a la anulación de candidaturas.
GARA |
Al contrario que otros compañeros de partido y de otras formaciones en liza, Ramón Jáuregui no ocultó ayer su apuesta por evitar que ANV acceda a las alcaldías donde ha sido la fuerza política más votada el 27 de mayo. En declaraciones a RNE, manifestó que el acuerdo con otras formaciones para apartar a la izquierda abertzale de los gobiernos municipales «es imprescindible. Es la respuesta lógica, el corolario democrático necesario a lo que acaba de ocurrir», en referencia a la finalización del alto el fuego de ETA.
Jáuregui reclamó un acuerdo político «del que no se habla y que me parece que ya es hora de hacerlo: que las mayorías minoritarias de ANV no puedan llegar a la alcaldía, por el acuerdo de los demás partidos de votar al segundo partido para que tenga la alcaldía». El dirigente del PSOE recordó que ya «se hizo en 1999 y es posible y necesario hacerlo» en consistorios como Pasaia, Arrasate o Bergara.
El diputado aseguró tajantemente que es «imposible» impedir que los electos de ANV tomen posesión de su cargo el sábado 16 de junio, como reclama el líder del PP, Mariano Rajoy, y explicó que «la regla constitucional en ese sentido es incuestionable e impecable desde el punto de vista democrático. Podremos discutir sobre la acción judicial del Estado, pero una vez producidas las elecciones -recalcó- el mandato electoral es inviolable».
Desde las filas del PSOE, su secretario de Organización, José Blanco, insistió en declaraciones a Onda Cero en el mensaje transmitido por Ramón Jáuregui de que es «imposible», como desea el PP, que los electos de ANV no tomen posesión de sus cargos. Blanco confesó que se quedó «sorprendido» y «sonrojado» cuando escuchó a Mariano Rajoy que «para poder apoyar al Gobierno los electos de ANV no tienen que estar en las instituciones».
Aseguró que Rajoy «sabe que eso es imposible» porque la jusrisprudencia del Tribunal Supremo español establece que una posible ilegalización de ANV no afectaría a los candidatos electos de este partido.
En La Moncloa, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros del Gabinete de José Luis Rodríguez Zapatero, su portavoz, María Teresa Fernández de la Vega, insistió en que ANV es una formación política que «ha pasado todos los filtros» que marca el Estado de Derecho y, por tanto, «está dentro de la ley». La vicepresidenta primera del Gobierno apostilló que «en una democracia como la nuestra no se le dice a los jueces, al Tribunal Supremo y al Tribunal Constitucional cómo hay que aplicar las normas».
«No tiene legitimidad»
A su vez, el candidato a diputado general de Bizkaia por Ezker Batua-Aralar afirmó que ANV «no tiene ninguna legitimidad» para reclamar los cargos electos que no le han sido asignados por la anulación de sus listas. José Ferrera dijo que los independentistas de izquierda son quienes «usurpan» cargos a su coa- lición y lo atribuyó a la Ley D'Hont que rige el reparto de las actas de apoderado. «ANV no está legitimada para reclamar ningún cargo de EB-Aralar», reiteró.
Por su parte, el coordinador general de EB, Javier Madrazo, pidió a Batasuna que, ante la constitución de los ayuntamientos, «alce la voz por la vulneración de derechos humanos que supone la amenaza de ETA a los concejales de otros partidos; es inmoral -añadió- que los electos de ANV tomen sus escaños y no digan nada»
Josu Murgia, juntero por Busturia-Uribe y miembro de Aralar, habló de que están «dispuestos» a participar en un diálogo para llegar a «un pacto democrático que hable de los cargos, de las presiones, de las amenazas, de los insultos...».
Herritarren bozen bidez erabakitakoa errespeta dadin, bi aste hauetan tinko aritu dira EAE-ANVko kideak, baina eskuratutako fruituak ez dira arras positiboak izan. Gipuzkoako hiriburuan adibidez, EAE-ANV alderdiak udal talde guztiei zein Odon Elorzari, Donostiako alkateari berari, bai telefonoz bai idatziz behin eta berriz aldebiko bilerak eskatu arren, PPrena salbu, ez du inolako erantzunik jaso. Agustin Rodriguezek, EAE-ANV alderdiko zerrendaburuak, Donostiako Udalean atzo goizean egindako agerraldian gogor gaitzetsi zuen.
EAE-ANVk donostiarren 11.000 boz eta hiru zinegotzi eskuratu dituela adierazi zuen Rodriguezek; baina EAJk, PPk eta PSEk hartuko dituzte kargu horiek. Halaber, datorren larunbatean osatuko den udalbatzak donostiarren erdia ere ordezkatuko ez duela jakinarazi zuten. Donostiarren %47,58a izanen da ordezkatua eta «alkate-presidenteak» soilik %18,61 ordezkatuko duela esan zuen Rodriguezek. Erantzunik jaso ezean, eta datorren larunbatean udalbatza «ez demokratikoa» osatuko balitz, elkarretaratzea eginen dutela ere jakinarazi zuten. Hitzordua, udalbatza osatzeko ekitaldia baino ordu erdi lehenago izango dela adierazi zuen.
Gipuzkoako ANVko bederatzi batzarkidek ere agerraldia egin zuten atzo. Herrialde honetan 291 zinegotzi eta 12 batzarkide eskuratu dituztela adierazi arren, horietatik, 85 hautetsi eta 12 batzarkide «lapurtzeko arriskuan» direla gogoratu zuten . Hori gerta ez dadin, herritarrek bozen bidez adierazitakoa errespeta dezatela exijitu zieten beste alderdiei eta bide horretan 182.2 artikulua aplikatzeko deia egin zuten.
Los parlamentarios de Ezker Abertzalea reclamaron en el pleno de la Cámara de Gasteiz que se «respete la voluntad del pueblo» y que los otros partidos no acepten «los escaños que no les corresponden».
En su intervención, la parlamentaria Nekane Erauskin consideró que, a la vista de la usurpación de cargos a ANV en ayuntamientos y diputaciones, no es momento de hablar de autonomía municipal.
El parlamentario de EB Oskar Matute consideró que la propuesta de Jáuregui es «extraña», especialmente cuando parte «de un alto representante del partido que decidió que ANV podía estar presente» en las urnas.