En vísperas de la constitución de los ayuntamientos vascos, los partidos emplazados desde ANV a ceder los electos que la ciudadanía otorgó con su voto a esta formación siguen topando con los discursos de los dirigentes de PNV, EA o EB, además, claro está, de los de PP y PSOE. Los portavoces de los partidos vascos lanzan claros mensajes en contra de esta opción, probablemente en un intento de evitar desmarques en algunas localidades concretas.

En esta línea, el portavoz del PNV en el Congreso, Josu Erkoreka, llegó a afirmar ayer que «a pesar de la oposición del PNV a la Ley de Partidos, la ley es la ley, y en un marco jurídico de un Estado de Derecho la ley se aplica, les guste o no, beneficie a quien beneficie y perjudique a quien perjudique».

«Han sido perfectamente conscientes de cuál era el marco en que concurrían», añadió Erkoreka en una entrevista a RNE. E introdujo otro curioso argumento: «Se benefician indirectamente de la ilegalización de otra formación que impulsaron desde entornos muy cercanos al suyo, así que si ANV ha conseguido determinadas concejalías, incluso algunas alcaldías, en parte se ha logrado gracias a la ilegalización de ASB. Del todo limpios tampoco son sus logros», concluyó Erkoreka.

EA ya dejó claro en una nota firmada por su dirección la pasada semana, en réplica a una comparecencia de junteros electos de ANV en Araba, que no dejarán sus cargos a quienes obtuvieron los votos para ello. Su secretario general, Unai Ziarreta, confirmó ayer que la pasada semana celebraron incluso una reunión con ANV para hacérselo saber «con claridad y firmeza».

En una entrevista a la emisora Onda Vasca, Ziarreta añadió, como Erkoreka, que «nosotros nos hemos opuesto siempre a la Ley de Partidos». Pero como única fórmula ofertó que «estamos incluso dispuestos a explorar cauces para que en aquellos municipios en los que han sido ilegalizados haya cauces de participación a través de nuestros concejales». «Parece que por parte de ANV no hay ningún interés», añadió.

Desde IU, fue su máximo dirigente estatal, Gaspar Llamazares, quien respondió al emplazamiento de ANV tratando de poner la pelota en su tejado. Le instó a desmarcarse «claramente» de la kale borroka, a que «condene de una vez la ruptura de la tregua por parte de ETA» y a que «no presione a las fuerzas políticas y a las instituciones de manera violenta».

Rodolfo Ares (PSE) se dirigió también a ANV en una nota en la que reclama que «se deje de desafíos y amenazas hacia los electos de partidos democráticos» y añade, como el resto, que «los concejales socialistas tienen toda la legitimi- dad que dan los ciudadanos en las urnas para tomar posesión de sus cargos, como harán el sábado».

Aralar no tomará cargos

El número dos de Aralar, Jon Abril, anunció por su parte tras reunirse con ANV que la formación a la que representa no tomará los cargos que no le hayan sido concedidos por los votos de la ciudadanía, aunque analizará «una por una las situaciones, municipio por municipio».

Abril dijo que así actuaron hace cuatro años, aunque en aquella ocasión la izquierda abertzale le atribuyó la usurpación de electos que le correspondían, como en Leitza, donde Aralar argumentó que lo hizo para evitar que UPN tomara la Alcaldía.